Según confirmó el coordinador del Centro de Referencia del Ministerio de Desarrollo Social provincial, Marcelino Álvarez, en Córdoba se suspendieron alrededor de 4.000 beneficiarios de pensiones graciables e invalidez.

Estas suspensiones surgen luego de una etapa donde se evalúa al beneficiario con diferentes bases de datos para ver si cumple con los requisitos establecidos. “El beneficiario es notificado que no cumple con los requisitos, se suspende el pago y se le informa que debe adecuarlos”, explicó Álvarez. En el caso que el luego pueda probar la normativa, “continúa cobrando el beneficio retroactivo al mes que se dio la suspensión”.
 
¿Cuáles son los requisitos?

Álvarez indicó que la pensión contributiva tiene dos requisitos fundamentales en las personas que presentan alguna incapacidad. Primero, la propia condición de discapacidad; segundo, la condición de “discapacidad social”. “En esto hago referencia a los motivos más frecuentes que hemos detectado en las suspensiones. El más común es el amparo familiar”, planteó el funcionario.

El beneficiario de la pensión no contributiva es detectado como incompatible para acceder al beneficio cuando en su grupo familiar se encuentran ingresos superiores a tres haberes mínimos. “Eso es un motivo que lleva a la suspensión”, señaló. Otra de las causas es cuando el patrimonio del titular es incompatible, ya sea por posesión de más de dos inmuebles o más de dos vehículos.
 
El padrón provincial y nacional

Actualmente, en Córdoba hay un padrón vigente que ronda los 100 mil beneficiarios. A nivel nacional, en los últimos tiempos el padrón histórico estaba en el orden de las 350 mil pensiones, pero en diciembre de 2015 aumentó a 1.500.000 pensiones no contributivas. “Creció exponencialmente”, consideró Álvarez.