Ricardo Javier Ocampo, el autoproclamado gurú que se hace llamar Maestro Amor, fue condenado a 14 años de prisión al haber sido encontrado culpable de seis hechos de abusos sexuales agravados contra dos adolescentes cordobeses que vivían con él en sus residencias de Miraflores y Colonia del Valle, dos localidades ubicadas a unos 20 kilómetros de la ciudad de Catamarca.

Ocampo cumplirá su pena de prisión en la cárcel de la localidad de Miraflores, a unos 20 kilómetros de la ciudad de Catamarca. La penitenciaría está ubicada justo frente a su residencia particular.

Este caso marcará la historia judicial argentina en la aplicación del artículo 119 del Código Penal, ya que el abuso sexual fue agravado por la condición de "maestro" que Ocampo tenía sobre las víctimas. Es un fallo que puede ser tomado como referencia para otros casos que involucren a "gurúes" o "maestros".

En los alegatos realizados el miércoles, el fiscal Gustavo Bergesio, acompañado por el fiscal coadyuvante Miguel Mauvecín, había solicitado al tribunal que Ocampo sea condenado a 18 años de prisión, por considerar que los graves delitos que se le imputan quedaron probados durante la audiencia.

El abogado defensor de Ocampo, Diego Dieguez Ontiveros, había solicitado la absolución de su cliente.

En este momento el tránsito está cortado frente a la cámara del crimen catamarqueña que lleva adelante el juicio. Numerosos seguidores de Ocampo, que lo acompañaron en cada jornada del juicio, levantan pancartas e interpretan canciones, asegurando la inocencia de su líder.

El tribunal pidió que se hiciera presente en el lugar el Grupo de Intervención Rápida (GIR) de la Policía de Catamarca, para prevenir cualquier inconveniente que ocurra luego de la lectura de la sentencia.

Fuente: La Voz del Interior