En una carta a argentinos, Bergoglio manifestó su dolor ante la muerte de David Moreira en Rosario; "Me dolía el corazón de los que pateaban", dijo.
"Sentía las patadas en el alma". Reflexivo, y a través de una fuerte metáfora, el papa Francisco manifestó su dolor al ver imágenes de la golpiza a un joven de 18 años acusado de robar a una mujer en Rosario."Me dolió la escena. Fuenteovejuna, me dije", contó Jorge Bergoglio en una carta a dos argentinos.
El Papa se refería a la reconocida obra teatral de Félix Lope de Vega, donde la insoportable tiranía de un dictador llevó a una rebelión social en la que primaba la justicia por mano propia, a la que relacionó con la ola de golpizas a delincuentes en el país. Él se refirió específicamente al caso de David Moreira, el joven que fue golpeado por unos 50 vecinos de Rosario que lo acusaban de robar una cartera el pasado 22 de marzo. Murió tres días después.
"Me dolió la escena. Fuenteovejuna, me dije. Sentía las patadas en el alma", escribió el Papa en un acarta a los hermanos Rodolfo y Carlos Luna, dos humanistas que viven en Suecia pero están atentos a la actualidad argentina, según publicó uno de ellos en su página de Facebook.
"No era un marciano, era un muchacho de nuestro pueblo"-dijo Francisco sobre Moreira-. Me acordé de Jesús; ¿qué diría si estuviera de árbitro allí? «El que esté sin pecado que dé la primera patada»".
"Me dolía todo, me dolía el cuerpo del pibe, me dolía el corazón de los que pateaban", continuó el ex arzobispo porteño sobre sus sentimientos ante el caso.
"Pensé que a ese chico lo hicimos nosotros, creció entre nosotros, se educó entre nosotros. ¿Qué cosa falló?", se preguntó el Papa.
"Lo peor que nos puede pasar es olvidarnos de la escena -concluyó el Papa su sentida carta-. Y que el Señor nos dé la gracia de poder llorar ..., llorar por el muchacho delincuente, llorar también por nosotros ".