El vicepresidente se presentó ante el juez Ariel Lijo. Dejó dos escritos en los que da explicaciones sobre las acusaciones en su contra en la causa Ciccone. El fiscal pidió que lo citen por "negociaciones incompatibles" con la función pública.
El vicepresidente de la Nación, Amado Boudou, se presentó a las 11:20 en los tribunales de Comodoro Py junto a sus abogados. La iniciativa surgió luego de que el Ministerio Público le pidiera al juez federal Ariel Lijo la citación del funcionario a declaración indagatoria. De acuerdo con el dictamen, el ex ministro de Economía está señalado por "negociaciones incompatibles" con la función pública.
Apenas 20 minutos después salió por la puerta principal y contestó algunas preguntas de los medios que lo esperaban, entre ellos Infobae. "Yo ya expliqué esto, firmé algo cuando era ministro de Economía, pero no tengo nada que ver". Y continuó: "Más allá de cualquier decisión que se tome, porque los tiempos los fija ahora el señor juez, me puse a entera disposición; que sepa que va a tener toda la colaboración".
Boudou en la mesa de entradas del juzgado de Lijo
El vicepresidente aseguró que sus abogados dejaron dos escritos en el juzgado. Uno de ellos "redunda en explicaciones" sobre su actuación para levantar la quiebra de la imprenta ex Ciccone y el otro de carácter técnico objeta el dictamen del fiscal.
"Lo que yo pretendo es que esto se resuelva lo más rápido posible. Soy el primer interesado en que la causa avance y la Justicia tenga una resolución rápida", señaló antes de retirarse. Le preguntaron si en algún momento pensó en renunciar o pedir licencia, pero no contestó.
Cuando el vicepresidente se retiraba, una periodista resbaló y cayó en las escaleras de Comdoro Py. El vicepresidente la ayudó a incorporarse, la acompañó hasta el hall del edificio y le recomendó sentarse en una silla. "¿Está bien?, ¿seguro?", interpeló el funcionario. Ante la respuesta positiva de la mujer, le dio un beso y se retiró al subsuelo, desde donde partió en su auto oficial.
Esta mañana el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, alineó a la tropa del Gobierno detrás del vicepresidente. Pese a los rumores que indicaban que el Ejecutivo le había "soltado la mano", el jefe de Ministros hizo una enfática defensa de Boudou y recordó que Mauricio Macri también está procesado por la Justicia y continúa en sus funciones.
Boudou está imputado por haber intervenido a favor del levantamiento de la quiebra de la ex Ciccone cuando era ministro de Economía en la primera presidencia de Cristina Kirchner. El presidente de la imprenta de papeles de seguridad era un empresario que vivía en un departamento de Boudou. Una vez que se desató el escándalo, el Gobierno decidió expropiar la compañía.