El ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, acusó al titular de la petrolera Shell, Juan José Aranguren, de pretender “dolarizar el mercado argentino de los combustibles”, y señaló que la actitud del ejecutivo de la multinacional “no sorprende a nadie”.
“Aranguren sigue pensando que la rentabilidad de los combustibles que produce en Argentina en pesos, con salarios e insumos en pesos, debe estar dolarizada, como si los vendiera en el mercado global y no a los consumidores del país”, consideró De Vido.
Aranguren había justificado la suba del precio de los combustibles de esa compañía de capitales holandeses y británicos en función de la modificación del tipo de cambio que se registró en Argentina en los últimos días.
“La actitud del titular de Shell no sorprende a nadie porque hace pocos meses había anticipado que iba a esperar que cambie el gobierno para invertir. No explicó qué política quería, ni tampoco si era una postura personal como empleado jerárquico de una multinacional”, destacó De Vido.
Y agregó: “Aun teniendo la concesión de Yacimientos con enorme potencial, como Cruz Lorena, Sierras Blancas y Aguila Mora, entre otros, que le permitirían abastecer con petróleo propio a su refinería, la empresa informa que posterga inversiones”.
El funcionario remarcó que la política de Shell consiste en “adecuar la demanda de energía de los argentinos con la oferta disponible en el mercado local vía precios dolarizados y alineados con los internacionales.”
“Debería tomar de ejemplo el gigantesco plan de inversiones que lleva adelante YPF cuyos resultados ya están a la vista con los aumentos de la producción de petróleo y gas”, subrayó.
Por último, el ministro indicó que actuará con la misma firmeza que tuvo Néstor Kirchner ante cada acción de desabastecimiento emprendida por Aranguren.
“Vamos a luchar para no dejar que nos impongan precios dolarizados. La Presidenta tampoco permitirá que los intereses inconfesables lleven al país a un nuevo ciclo de desocupación y exclusión”, puntualizó.