Meghan Markle presumió de tener "los dos mejores chicos del mundo" en el momento de presentar oficialmente a su hijo recién nacido junto al príncipe Enrique, en el castillo de Windsor. En un día especialmente lluvioso, la pareja decidió presentar al conocido popularmente como "baby Sussex"(aún no tiene nombre) bajo techo y ante la presencia de un grupo selecto de medios, entre ellos el canal norteamericano CBS, por deseo expreso de Meghan.

"Ser padres es algo asombroso", dijo Enrique en la breve presentación. "Han sido solo dos día y medio, tres días, y estoy tanto tan emocionado ahora que tenemos este pedacito de alegría".

El niño, que pesó al nacer 3 kilos y 260 gramos, es el séptimo en la línea del trono y el primer descendiente mestizo en la familiar real británica. El nacimiento se produjo al final el hospital Portland de Londres, un privadísimo centro médico norteamericano, a donde fue trasladada Meghan en secreto en la madrugada del domingo por recomendación de los médicos, tras la una semana de retraso sobre la fecha prevista para el nacimiento.

La duquesa de Sussex, de 37 años, no pudo al final cumplir su sueño de un parto natural y en casa, en el palacio de Frogmore, junto al castillo de Windsor. Se desconoce si fue un parto inducido o si fue necesaria finalmente una cesárea.

La madre, vestida de blanco y sin mangas, apareció sonriente y radiante en la presentación de baby Sussex, sin ocultar la silueta posparto, como hacen otras celebrities. Los británicos redoblaban entre tanto las apuestas para el nombre: Albert, Arthur, Alexander, James y Philip iban en cabeza, aunque Meghan puede inclinarse finalmente por un nombre más "americano", como Liam.

"Tiene un temperamento muy dulce, es un niño muy tranquilo", dijo Meghan, ante la sonrisa complaciente de Enrique, cuya paternidad fue celebrada entre bromas el día anterior por su hermano Guillermo: "Bienvenido al club de la falta de sueño".
La reina Isabel II, que asistía al Windsor Horse Show en el momento de la presentación, se reservó el derecho de ser la primera de la familia real en conocer a su octavo bisnieto, en compañía en Felipe de Edimburgo. El abuelo, el príncipe Carlos, se encontraba de viaje en Alemania cuando se produjo el nacimiento y espera poder conocer a su nieto en los próximos días.

Tras la presentación oficial, Enrique tiene previsto viajar el jueves a La Hayapara la presentación de los Invictus Games, aunque la Casa Real no ha confirmado aún el viaje. Al padre se le ve extático desde el nacimiento. "Esta pequeña cosa es absolutamente para morirse", dijo el lunes pasado. "Me siento como si estuviera en la Luna".

El Mundo