Con ellos empezó todo. Literalmente, de hecho. Pese a que el boom de las boy bands -los grupos musicales formados por chicos que cantan, bailan y posan- no llegó hasta la década de los 90, fueron los New Kids on the Block los que, adelantándose a su tiempo, marcaron el ritmo. Antes de que Backstreet Boys o Take That arrasasen en las listas de ventas, la banda de Boston había logrado todo lo que nunca hubiesen imaginado. Y ahora,treinta años después de su debut, que se dice pronto, vuelven a convertirse en un fenómeno gracias a su último single Boys in the band, un tema donde aprovechan para bromear sobre los tópicos de los propios grupos de chicos. Al final, el humor siempre puntúa bien.

¿Qué ha pasado en estos treinta años? A mitad de la década de los 80 y tras algún intento fallido, los hermanos Jonathan Knight y Jordan Knight junto a Joey McIntyre, Donnie Wahlberg y Danny Wood formaron los New Kids on the Block. Sus primeros singles y su primer disco no es que tuviesen una respuesta masiva en un principio. Aunque, de repente, se posicionaron en lo más alto de las listas al comenzar a sonar en diferentes emisoras. Una historia propia de leyenda musical, de esas que tanto gustan a los fans y biógrafos. Entonces llegaron las ventas, las giras interminables de conciertos y el éxito masivo. Nada podía ir mal. Menos el paso del tiempo, claro. En cuanto dejaron de ser tan jovencitos, se les esfumó entre las manos. La salida de Jonathan Knight del grupo fue el principio del fin. La banda se separaba y cada uno trataba de sobrevivir a su manera.

CARRERAS (Y FRACASOS) EN SOLITARIO

Tras la salida de su hermano, Jordan Knight (48) aprovechó la popularidad para continuar con su carrera musical aunque fuese en solitario. Se embarcó en una gira y logró que su primer single llegase al top 10. La alegría, eso sí, le duró poco y sus siguientes trabajos quedaron muy lejos de lo que estaba acostumbrado. Con todo, se mantuvo fiel a la música -con alguna aparición en televisión como coach de programas- y fue quien se empeñó en organizar la vuelta de los NKOTB. Está casado y tiene dos hijos. ¡Y formó equipo musical con Nick Carter! Un New Kid y un Backstreet Boy tratando de conquistar el mercado. Eso no se ve todos los días.
También intentó seguir el mismo plan Joey McIntyre (46). En cuanto se disolvió el grupo lanzó su propio disco, Stay the Same, y logró colarse en el top 10 de ventas. Un éxito moderado que le llevó a publicar otros cuatro trabajos -incluido un disco de villancicos- aunque sin la misma repercusión. De hecho, terminó combinando su vertiente musical con la de actor en algunas series de televisión y obras de Broadway. Aunque el nuevo empuje le vino de mano de 'Bailando con las estrellas', el reality de famosos que compiten bailando. En su vida personal tuvo mucho más suerte. Está felizmente casado y tiene tres hijos.

Mucho mejor le ha ido a Donnie Wahlberg (49), el ex NKOTB que ha logrado posicionarse como un actor de cierto prestigio. Claro que ser hermano de Mark Wahlberg -por si quedaba alguna duda con el apellido- también ayuda. Donnie se dio cuenta de que en el cine tenía mucho más que ofrecer y se pasó de disciplina tras el fin de la banda. Apareció en El sexto sentido, trabajó con Spielberg y tiene un papel protagonista en la serie Blue Bloodsjunto a Tom Selleck. Vamos, que no puede quejarse lo más mínimo. Y encima, está casado con la actriz y presentadora Jenny McCarthy, que ya es un mérito en sí mismo.

En la cola del pelotón se encuentran Danny Wood (49) y Jonathan Knight (50). Ambos han tenido que ver como sus compañeros de formación lograban recuperarse de la ruptura, con mayor o menor éxito, pero al menos sobrevivían. Wood hizo un primer intento por continuar en la música pero pronto vio que le iba a ir mejor cambiar de puesto y convertirse en productor. Jonathan directamente ni eso. Se retiró de la vida pública en cuanto terminó en NKOTB y pasó a gestionar la fortuna que había ganado adentrándose en el mercado inmobiliario. Tan solo volvió a dejarse ver para confirmar su salida del armario y posterior matrimonio con Harley Rodriguez.

Con el paso del tiempo, todos vieron que sin los NKOTB la situación se les estaba complicando demasiado. Víctimas de un ataque de nostalgia y, seguramente, de una buena oferta económica, en 2008 decidieron volver. Publicaron su primer disco en 14 años y la acogida fue mejor de lo que muchos podían haber pensado. Desde entonces, de hecho, no han parado demasiado. Giras, conciertos, nuevos trabajos y una alianza junto a los Backstreet Boys -que les copiaron rápidamente la estrategia- capaz de contentar a dos generaciones de fans con ganas de volver a la adolescencia. Para que luego digan que no se puede ser un ídolo juvenil llegados a los 50.

El Mundo