Como cada 19 de octubre, hoy celebramos el Día Mundial del Cáncer de Mama, una enfermedad que afecta a una de cada ocho mujeres a lo largo de su vida, según cifras de la AECC. Este día nos sirve como un recordatorio del compromiso que tenemos toda la sociedad en la lucha contra esta enfermedad.
La detección temprana del cáncer de mama es básica a la hora de diagnosticar un posible tumor mientras se encuentra en un estado inicial, pudiendo utilizar tratamientos menos agresivos y conseguir un mejor pronóstico de la enfermedad.
En muchas ocasiones el cáncer de mama cursa sin síntomas, por lo que es muy importante que nos realicemos las pruebas de detección programadas, como las mamografías en las revisiones ginecológicas. Además de esto, la autoexploración mamaria regular puede ayudarnos a detectar algunas anomalías y a consultar de inmediato a nuestro médico: te explicamos cómo se hace paso a paso.
¿Cómo se hace una autoexploración mamaria?
Comenzaremos colocándonos frente a un espejo con las manos en las caderas y los hombros rectos. En esta posición debemos analizar tanto el tamaño como el color y la forma de nuestras mamas , que deben ser normales. También debemos comprobar que no existan alteraciones en la forma, como bultos u hoyuelos.
Una vez hecho esto, levantaremos los brazos por encima de la cabeza, uniendo las manos, y comprobar de nuevo que, a la vista, la forma, el tamaño y el color de las mamas es normal.
También nos aseguraremos de que no sale líquido de los pezones cuando los presionamos suavemente.
Para continuar la autoexploración mamaria nos tumbaremos boca arriba y exploraremos cada pecho con la mano contraria (el pecho derecho con la mano izquierda, y viceversa).
Podemos recostarnos sobre una almohada levantando el brazo de la mama a explorar y, uniendo dos dedos y manteniéndolos en una postura firma, ir realizando movimientos circulares sobre la mama cubriendo toda su superficie, de arriba a abajo (desde la clavícula hasta el abdomen) y de lado a lado (desde la axila hasta el esternón).
Debemos asegurarnos de que la mama no presenta bultos, palpando todo el tejido mamario.
Para finalizar, realizamos de nuevo esta exploración con pequeños movimientos circulares con las yemas de nuestros dedos, pero esta vez mientras estamos de pie y levantando el brazo del mismo lado de la mama que vamos a explorar.
Si notamos alguna anomalía durante la autoexploración debemos consultar con nuestro médico para que nos indique cuáles son los siguientes pasos a seguir.
Como cada 19 de octubre, seguimos sumándonos al rosa para luchar contra el cáncer de mama.