Dos grandes cadenas reaccionaron ante la caída del consumo y el cambio de hábito de los usuarios.
Un regreso a las fuentes. Así podría definirse la acción Precios Corajudos que en las últimas horas anunció Carrefour, y que contempla el congelamiento por seis meses de una canasta de 1300 productos de marca propia. La propuesta llega para romper con una política sostenida de la cadena, con algunos vaivenes, durante los últimos 10 años basada en las acciones promocionales y los descuentos asociada con los bancos y la industria.
"Desde hace 35 años tenemos el compromiso de ofrecer «el precio más bajo garantizado». Con Precios Corajudos buscamos reforzar ese compromiso y brindar la más amplia gama de productos de calidad al mayor número de personas, dándole prioridad al precio. Estos 1300 productos representan el 80% de los artículos que forman parte de la canasta básica alimentaria, por lo cual se convierte en el mejor aporte que la compañía puede ofrecer a sus clientes para ayudar en la economía familiar", explicaron en Carrefour Argentina.
La acción incluye únicamente los productos de la marca Carrefour, que en realidad no son fabricados por la propia cadena, sino elaborados por terceros en un sistema conocido como "a facón". Las marcas propias son una propuesta relativamente conocida en la Argentina -los primeros antecedentes se remontan a la década del 70-, aunque a diferencia de lo que ocurre en otros mercados más desarrollados, donde su participación ronda el 40% de las ventas, a nivel local su incidencia sigue siendo minoritaria y ronda el 10% del total de la facturación de una cadena.
En realidad, Carrefour no fue la pionera en volver a apostar al precio en detrimento de las promos. Hace un par de semanas, Walmart anunció una campaña con más de un punto de contacto. Con el eslogan: "Precios imbatibles", la cadena fundada por Sam Walton retomó su tradicional política de "precios bajos todos los días" y lanzó un compromiso público de ofrecer una canasta de 480 productos con precios similares a los de los mayoristas, y disponibles todos los días y con todos los medios de pago (es decir, sin necesidad de participar de una promo).
Detrás de este tipo de acciones se encuentran las graves dificultades que enfrentan los grandes supermercados, que no sólo son víctimas de un consumo que no termina de reactivarse, sino también del cambio de hábito de los consumidores.
Como pasó en 2002, en los últimos dos años y coincidiendo con el declive de políticas impulsadas durante el kirchnerismo, como el plan Precios Cuidados, se intensificó un proceso de éxodo de clientes de los hipermercados a los mayoristas.
El Gobierno, satisfecho
Cadenas como Maxiconsumo, Diarco o Vital reconvirtieron sus locales para hacer convivir a su tradicional clientela, compuesta por pequeños comerciantes, almaceneros y supermercadistas chinos, con los consumidores finales que se volcaron a los mayoristas buscando precios claros. En este sentido, un dato a tener en cuenta es que según un relevamiento de la consultora Scentia, sólo el 45% de los hogares argentinos considera que las promociones de los supermercados son convenientes y el 73% cree que las grandes cadenas aumentan los precios antes de lanzar una promoción. Este último punto no es menor, aunque los especialistas del sector relativicen que se trate de maniobras masivas.
La decisión de Carrefour y Walmart de volver a apostar por el precio fue bien recibida por el Gobierno. "Por fin los supermercados están viendo que es por acá, que la agenda de transparencia en los precios de consumo masivo que impulsa el Gobierno está en sintonía con el cambio cultural del consumidor que reclama honestidad en la propuesta comercial y que rechaza las ofertas distorsivas. Por otra parte demuestra la confianza en la baja de la inflación de dos empresas internacionales", explicó al diario La Nación una fuente cercana a la Secretaría de Comercio.
1300
Productos
Carrefour anunció el último martes el congelamiento por seis meses de una canasta de artículos de marca propia a la que bautizó como Precios Corajudos.