Durante largas horas de ayer, varias localidades del norte cordobés quedaron aisladas, con el suministro de energía suspendido, con dificultades de conexión a Internet y con el servicio de agua potable restringido.
 
Ese fue el saldo del temporal que se llevó dos puentes: uno sobre la ruta E-66 –sobre el que se había montado un puente Bailey que también fue arrastrado– y otro entre Villa del Totoral y Las Peñas.
 
En el momento más crítico no se podía viajar en dirección a la ciudad de Córdoba porque el agua sobre la carpeta asfáltica no lo permitía sobre la ruta 9 norte y tampoco por la ruta nacional 60.
 
Allí, a la altura de Avellaneda, llegó a tener una profundidad de 1,50 metros.
 
Al llegar a Jesús María tampoco se podía cruzar porque el puente que la une con Sinsacate sigue cortado y los otros tres puentes internos de la ciudad (Maturano, Colón, y de barrio Norte) estuvieron cortados en forma preventiva.
 
Sin ruta. Entre Totoral y Villas Las Peñas se desmoronó un puente. Ayer se trabajaba para reanudar esa vía clave del norte cordobés .
 
 Sobre la ruta E-66 se había montado un puente Bailey, que también fue arrastrado por la fuerza del agua .

La ruta 158 , en Dalmassio Vélez  está cortada la ruta, antes de llegar a la localidad de General Cabrera.