Entre los 3.700 pasajeros a bordo del crucero japonés Diamond Princess que fue puesto en cuarentena hay 8 argentinos, aunque se confirmó que ninguno de ellos presenta síntomas de contagio.
El barco se encuentra amarrado desde el lunes en el puerto de Yokohama, al sur de Tokyo. Las autoridades niponas denegaron su desembarco y ordenaron ponerlo en cuarentena tras confirmarse que uno de los pasajeros estaba infectado con el coronavirus causante de la neumonía de Wuhan.
En tanto, el cónsul argentino en Japón, Carlos Alfaro, confirmó este miércoles que "hay 8 argentinos" entre la tripulación y los pasajeros a bordo de la embarcación.
En declaraciones al canal Todo Noticias, Alfaro informó que "están todos bien de salud pero están enfrentando una dificultad que no esperaban en sus vacaciones".
"Todos han sido chequeados, ellos no estaban entre las personas con mayor riesgo, pero han sido chequeados por fiebre y por otros posibles síntomas. Están todos bien", aclaró.
El cónsul también comentó que se les pidió a los argentinos que "se mantengan en sus camarotes", por lo que están "con movilidad restringida dentro del barco para evitar posibles contagios".
"La mejor medida hoy por hoy es la cuarentena para evitar un contagio. En principio es hasta el 19 de febrero", agregó.
A su vez, precisó "si bien la mitad de los pasajeros son japoneses, hay 400 estadounidenses, también hay cientos de australianos y el resto de Latinoamérica también tiene gente".