Se movilizaron este viernes por el centro de Córdoba para reclamar que su trabajo cuente con un salario fijo, ART, obra social y aportes.
Un grupo de trabajadores de aplicaciones de delivery protestaron este viernes en el centro de Córdoba para denunciar la precarización laboral que sufren y reclamar que su trabajo cuente con un salario fijo, ART, obra social y aportes, entre otras condiciones.
“Somos más de 2.000 jóvenes que trabajamos en empresas como PedidosYa, Rappi, Glovo y Uber Eats en Córdoba. Con la crisis económica y el aumento de la desocupación, nos vemos obligados a trabajar en condiciones deplorables para mantener a nuestras familias, pagar el alquiler o afrontar los gastos de estudio. Algunos hemos trabajado toda nuestra vida en negro por dos monedas. Muchos somos inmigrantes, y no conseguimos otro trabajo”, manifestaron desde el colectivo “Rappis y furioses”.
Sostienen además que son caratulados como “colaboradores”, pero eso significa en realidad que no cuentan con un sueldo fijo, aportes jubilatorios, obra social, ART ni vacaciones pagas.
“Pagamos la mochila y el uniforme y si sufrimos un accidente o un robo nos tenemos que pagar la atención médica, las empresas no se hacen cargo de nada. Lo que ganamos por cada entrega es una miseria y lo pagan con retraso, por lo cual tenemos que pedalear ocho horas por día para llegar a fin de mes. Muchos terminamos dejando nuestros estudios”, afirman además.
Además, indicaron que la firma PedidosYa es la única empresa que tiene a sus trabajadores en relación de dependencia. Sin embargo, señalaron que “ya despidieron a 14 personas en Córdoba, 130 en Rosario y 450 en Buenos Aires, para empezar a contratar gente en negro”.
En tanto, aseguraron que existe una complicidad entre las empresas de plataformas y los Estados provinciales y nacionales. “Se aprovechan de nuestra desesperación para decir que hay empresas extranjeras que invierten en el país”, declararon.