Francisco y Anna se conocieron en Los Nogales, una pequeña localidad del departamento de Caseros, en la provincia de Santa Fe. Se descubrieron en una de las tantas reuniones de amigos y vecinos. Duelos de bochas los sábados, asados multitudinarios los domingos y juegos de naipes cuando las obligaciones quedaban en pausa al menos por un rato.

Gente Necesaria se contactó con él y su hija mayor, Elsa Giampaoli para conocer los detalles de esta historia de amor.

“Lo más importante para permanecer tantos años en pareja es ponerse de acuerdo en las cosas simples. Y si alguno se equivoca, pedir perdón. Hemos discutido, sí, pero no tuvimos grandes peleas. Siempre hicimos las cosas con amor”, cuenta Francisco Giampaoli. Creció con sus padres y 11 hermanos, trabajó en el campo desde los 10 años en la siembra, la cosecha y el tambo.
 
El 24 de diciembre cumplirá 101 años y  lleva más de 71 años de casados con Anna Evangelista, de quien se enamoró perdidamente cuando la vio por primera vez en una juntada con amigos.

Permanecieron casi cinco años en ese estado hasta que decidieron dar el gran paso: se casaron y se fueron a vivir juntos. “Y seguimos así, aunque ahora estamos jodidos. Los dos estamos pisando la raya”, sostuvo Francisco entre risas.

Se convirtieron en padres con el nacimiento de Elsa, en 1952. Luego llegaron Oscar (1953) y Liliana (1962).
 
“Muchos años juntos, siempre a la par. Nos enseñaron muchas cosas buenas como el trabajo y la unión de la familia”, dijo su hija mayor Elsa Giampaoli. “Cada vez que nos juntamos en la mesa del domingo somos como 20 porque tienen 3 hijos, 5 nietas y 3 bisnietas”, manifestó.