La Justicia investiga a sospechosos con antecedentes penales de las afueras de Rosario; se incautaron armas
La investigación por el atentado contra el domicilio del gobernador de Santa Fe, Antonio Bonfatti, tuvo un avance concreto ayer cuando las fuerzas de seguridad provinciales realizaron 11 allanamientos, en los que detuvieron a tres sospechosos y se secuestraron armas de fuego, que se van a peritar para establecer si fueron utilizadas el día del ataque a la casa del mandatario provincial en esta ciudad.
En medio de un gran hermetismo, las órdenes de allanamiento que cumplieron la Tropa de Operaciones Especiales y la División Judicial de la Unidad Regional II partieron del Juzgado de Instrucción N°5, a cargo de María Luisa Pérez Vara. Hasta ahora la investigación no había tenido ningún resultado concreto. La magistrada enfrenta duras críticas en el seno del Poder Judicial, por actuaciones polémicas vinculadas con causas contra jefes policiales sospechados de enriquecimiento ilícito.
Los operativos -que estuvieron coordinados por la TOE, una fuerza de elite provincial- se iniciaron alrededor de las cinco de la madrugada y continuaron hasta la tarde. Se allanaron viviendas ubicadas en distintas zonas de Rosario y Granadero Baigorria, donde quedaron demoradas siete personas, de las cuales tres quedaron finalmente detenidas y el resto fueron liberadas. "En los allanamientos se incautaron armas que serán peritadas para establecer si se usaron en el ataque contra la vivienda particular de Bonfatti", afirmó a LA NACION la secretaria de Delitos Complejos Ana Viglione. Hoy está previsto que los operativos encabezados por la TOE continúen en Rosario y localidades cercanas. Adrián Forni, jefe de esa fuerza, señaló que "la línea de investigación en la que se trabaja tiene que ver con personas que ya tienen causas en la Justicia".
HERMETISMO
El marcado hermetismo que reina en la causa se debe, según confiaron a LA NACION altas fuentes de la Justicia, a que empezaron a profundizarse en las últimas horas nuevos elementos que podrían dar resultados positivos en la investigación en el corto plazo.
"En estos casos hay que ser pacientes, esperar y ver cómo se van desarrollando los acontecimientos", señaló el procurador general de la Corte Suprema, Jorge Barraguirre, quien advirtió: "Los fiscales están bien orientados y alguna de las hipótesis que se barajan pueden empezar a ver la luz".
Una de las pistas que se siguen es la vinculada con la denominada banda de Los Monos, un grupo narcocriminal que surgió hace 20 años en la zona sur de Rosario, y que comenzó a ser desarticulado a partir de la investigación que llevó adelante la justicia provincial, tras una escalada de asesinatos que empezó con el crimen de Martín "Fantasma" Paz, el 8 de septiembre de 2012.
La casa del gobernador de Santa Fe, ubicada en el barrio de Alberdi, en la zona norte de Rosario, fue alcanzada por diez disparos el viernes 11 de octubre pasado cerca de las 22, cuando Bonfatti se encontraba viendo televisión en el living junto con su pareja, Silvia Tróccoli.
Luego, el 16 de octubre pasado se volvieron a encender las alarmas en torno a la seguridad del mandatario provincial. Ese día la jueza de instrucción Raquel Cosgaya -quien estaba de turno- recibió un mensaje de texto en el celular que advertía sobre un posible atentado contra el gobernador. El mensaje, que salió de un aparato registrado en la ciudad de Santa Fe, decía: "Ojo con Bonfatti y [Ana] Viglione porque se la van a poner en la autopista". La ruta a la que aludía el mensaje es la Brigadier López, que une Santa Fe con Rosario, que Bonfatti utiliza diariamente, explicaron sus allegados.
LA VIOLENCIA EN LA CAMPAÑA
Antonio Bonfatti - Gobernador de Santa Fe
Atentado
La vivienda del gobernador fue atacada a balazos en la noche del 11 de octubre
Movilización
Stolbizer y Alfonsín encabezaron anteayer una marcha de repudio
Allanamientos
Fueron detenidos tres sospechosos y se secuestraron armas de fuego