En los próximos días
volverá a funcionar la Central Nuclear de Embalse. Su vida útil se extenderá por 30 años y se añadieron subsistemas de seguridad que tienen monitoreo internacional.
Walter González, empresario riocuartense especializado en soluciones tecnológicas y partícipe en el proceso de actualización, comentó a LV16 que se añadieron nuevos componentes y piezas que hacen al correcto funcionamiento de la central.
Según indicó, se cambiaron al menos “un 50 por ciento de los componentes que integran toda la parte activa de generación de energía eléctrica por medio de fisión nuclear”.
“Se cambiaron todos los sistemas de controles y se agregaron dos subsistemas nuevos de enfriamiento en caso de catástrofe, exigido por una comisión internacional”, explicó González.
De esta manera, todo lo incorporado “no depende de decisiones estrictamente de Argentina”. Existe una comisión internacional “muy estricta que expide los certificados de funcionamiento”.
El empresario contó que su participación en la actualización de la Central Nuclear de Embalse estuvo vinculada a nivel de ingeniería y montaje. Además de sumarle vida útil, la usina fue repotenciada su capacidad de producción un 20 por ciento.
De los componentes añadidos, “un 95 por ciento de equipos, instrumentación y hasta materiales, son internacionales”, aseguró González.