En el transitar cotidiano delineamos el perfil de una ciudad, que con sus luces y sombras es nuestro lugar de elección para echar raíces y trazar nuestros sueños...
Río Cuarto con más de dos siglos y tres décadas ha trazado una radiografía del ser riocuartense, de hombres y mujeres que construyeron la ciudad de espaldas a su principal característica, el río, que recién en pleno siglo XXI comenzó a ser mirado e incorporado a la fisonomía urbana.
Un río que por años fue vergonzoso por su poco caudal de agua, sin tener en cuenta que el mismo es profundo porque su esencia corre debajo de la arena, debajo de lo que se ve y que, cuando llueve en la ciudad, marca su poderío por los lugares donde fue desterrado.
Río Cuarto es una ciudad que tiene poco de pasado, pocos han cuidado su patrimonio arquitectónico, pero los lugares que nos quedan son nuestro orgullo, son ese pedacito de tiempo viejo que miramos con nostalgia con la certeza de lo que ya no volverá…
Y así nos movemos en torno a esos lugares que amamos, que son parte de nuestro costumbrismo, que generación tras generación, con ciertas variantes, siguen perpetuando ritos, encuentros, comportamientos.
Los riocuartenses somos esa especie de entramado de urbanos pueblerinos, de doctores en todología, amigos de los cafés y de las charlas intrascendentemente buenas, siempre tenemos un amigo que nos contó cómo fueron los hechos, así que nos damos el derecho de opinar como si hubiéramos estado en el suceso, somos intelectuales, universitarios, trapitos en las esquinas, gitanos pedigüeños, descalzos e insistentes, somos las mujeres más lindas del país, porque en el Imperio sólo se admite la belleza que se imprime en el físico, en el alma, en la lucha de quienes no tranzan y se rebelan contra el sistema para imprimir una huella que trasciende nuestros cuatro ranchos y un convento.
230 años de una ciudad señorial, que recibió inmigrantes de todos lados, que se extendió en pobreríos, en prostíbulos, que creció con el tren y los campos, ciudad protegida por la virgen y por todos los cultos religiosos que ocupan grandes predios y que elevan su fe en canciones y manifestaciones.
Ciudad capital para que nos sigamos regodeando en que somos un poco Imperiales, y de villas que se pierden en el horizonte, donde nace el sol, entre los desperdicios ajenos, porque en esta ciudad tan sojera y de grandes countrys hay muchos que con suerte cenan un mate cocido.
En este lugar en el mundo, con sus luces y sombras, los que amamos esta tierra hemos decidido dejar crecer nuestras raíces, mientras nos enorgullecen los adultos mayores del Illia y el Peam y los pequeños de los colegios que a diario nos sorprenden con creaciones y avances.
Por esta tierra pasó Filloy y el hombre del árbol, y en la Plaza Roca se encuentran, en igualdad fantasmagórica, para hablar de la vida, porque esas licencias se dan los que alguna vez pasaron por aquí…
Río Cuarto es inmensa, es inabarcable, de cada esquina podemos contar alguna historia, de sus barrios y su gente estamos hechos y de esos pequeños y grandes actos solidarios de los hidalgos desconocidos podemos decir que lo cotidiano se transforma en un buen día…
Por eso festejamos 230 años porque en esta ciudad de profundas diferencias también tenemos razones sobradas para encontrarnos en lo esencial, en eso que nos reconoce y nos llena el alma porque somos de acá y eso ya es decir mucho más, es decir casa, hogar, terruño, raíces, amores, amigos, vida, muerte, abrazo, callecitas, ciudad, mi querido Río Cuarto…
Felices 230 años a todos los que somos parte de este lugar del mundo
Por Laura A. Pereyra
Imágenes: Obras realizadas por Julio Castellina en el Taller de arte de Eduardo Angelini CRONOGRAMA DÍA DE LA CIUDAD 11 DE NOVIEMBRE
- 9:00 Izamiento de Bandera en la Plaza Roca.
- 11:00 Acto Oficial con autoridades. Recorrido por el Centro Cultural Andino. Inauguración de muestras y ferias. C.C. del Andino.
- 17:00 Pericón Nacional Multitudinario en la Plaza San Martín.
- Desde las 18:00 Orquesta Barrial, Laura Rizzo y Ensamble Río Cuarto. Actuación especial de la Banda de Música de la Policía de Córdoba.
Aldo Esteban Domingo | Desde 1949 a 1966 viví en el querido Imperio; desde entonces en Santa Fe; el 13 de Marzo ppdo. viajé para festejar 100 años de la hermana mayor de papá; hacía 8 años que no visitaba Río IV; qué hermoso lo ví; cuando me fui solo había dos edificios -el del Grand Hotel Río IV y el Ópera-; pero más hermosa la gente, que no cambió con el tiempo; gente que trabaja, saluda, comparte, pasea, festeja; con su radio LV16 y Puntal, a quienes escucho y leo diariamente online, su plaza Roca y la Mujica, con mi querida Pquia. NS de Fátima, su cementerio; Lomitas de Oro, Villa Dalcar, Alberdi, el Brd. Roca, ...todo, todo hermoso, como su clima, sus calles, su identidad IMPERIAL, el recordado Nipon, Norton, Walton, Los 49, Pje. Dalmasso, La Calle, El Pueblo, César Córdoba... Pque. Sarmiento...¡¡¡Feliz cumpleaños querida ciudad!!!, hecha realidad en ..."una Virgen que te guarda, Villa heroica del desierto...", con Paz, Justicia, Trabajo y BIen Común para todos.-