Una de las características calificativas más habituales de los gatos es su carácter misterioso y enigmático.

Existen muchos datos que surgen de los cada vez más frecuentes y profundos estudios sobre la conducta de los gatos que no solo desmienten esas aseveraciones, sino que profundizan sobre la personalidad de los gatos aportando características únicas y sorprendentes.

1 - Su origen

Los gatos tienen un origen común lejano con el perro y otros predadores. Este es el Dorma alocyon latouri, para algunos el Miacis que vivió hace unos 56 millones de años, un antepasado común de depredadores como gatos, perros, osos o incluso focas.

En términos más cercanos y recientes los gatos domésticos son la forma doméstica de una especie de gato silvestre africano, domesticado y venerado por su protección de las cosechas contra las alimañas por el pueblo del antiguo Egipto.

2 - La convivencia

La evidencia más antigua de una cohabitación de gatos y humanos tiene 9.500 años y proviene de Chipre.

Aunque su popularidad y mayor difusión la ha tenido en Egipto donde era deidad (Bastet , la diosa de la fertilidad) y además cada hogar tenía uno en respetable compañía a efectos de que los médicos descargaran en él las dolencias familiares.

3 - Los medicamentos

Los gatos tienen un metabolismo muy cerrado y particularmente especial. Generan una recirculación del agua y un ahorro de ella tan intenso que algunas drogas inocentes para los humanos pueden ser fatales para ellos.

La aspirina (ácido acetilsalicílico), por ejemplo, una droga clásica analgésica en los seres humanos, puede ser fatal para los gatos.
La lista puede ampliarse con otras drogas como la creolina, la dipirona y en general todos los fenoles que tiene un efecto tóxico fatal en los gatos.

La premisa con ellos es tener especial precaución a la hora de medicarlos y hacerlo solamente con la específica prescripción de nuestro médico veterinario de confianza.

4 - La dieta

Un gato salvaje debe cazar al menos 10 ratones al día para satisfacer sus necesidades calóricas diarias.

Los gatos no pueden saborear nada dulce. Un defecto genético es el responsable.

Por lo tanto, los alimentos con azúcar agregada no tienen un sabor diferente para los gatos que los alimentos sin azúcar.
Lo mejor es no darles productos azucarados.

5 - La relación con los humanos

Los gatos son animales de compañía, y su población en casas de familia aumentó en los últimos año, esta tendencia los señala como los animales de compañía y afecto más populares en muchos países.

Esto se debe a la facilidad de su cuidado y su independencia lo que se ajusta más a las normas y horarios de los tiempos modernos.

6 - La comunicación

Los gatos se comunican entre sí principalmente a través de su lenguaje corporal.

Es importante remarcar que, casi usan los maullidos solo con los seres humanos, ya que a menudo no perciben sus señales corporales.

7 - Su comportamiento

Los gatos son muy dormilones llegan a dormir hasta 16 horas al día, casi el 70% de su vida, ahorrando energía de ese modo para la cacería o su remedo: el juego.

Son de hábitos crepusculares o nocturnos lo que coincide en parte con los tiempos que le puede dedicar el ser humano urbano moderno.

8 - La anatomía y su poder de adaptación

Los gatos son ágiles y flexibles y a menudo nos asombra como puedan pasar por determinados lugares o manejar su cuerpo con ductilidad y fineza superlativa.

Varias son las causas anatómicas que le permiten estas cualidades. Los hombros de los gatos solo están conectados a la columna vertebral por ligamentos y músculos y la clavícula es solo un vestigio.

Esto hace que su esqueleto sea flexible y permita amortiguar los saltos y lo habilite a pasar por pequeños agujeros.
Un gato en forma puede saltar hasta 2 metros desde una posición de pie, sin corrida de impulso previa. Los gatos tienen 32 músculos en cada oreja, mientras que los humanos solo tienen seis.

Esto permite que sus orejas giren 180 grados, las levante y las pliegue a su voluntad posibilitando una audición tridimensional, que le permite calcular con precisión la distancia de una presa.

Por otra parte, el patrón de sus nariz es tan único como la huella dactilar de un humano.

Nota: Infobae/Por Dr Juan Enrique Romero