El fiscal Javier Di Santo se reunió con protectoras de animales y les dijo que no hay elementos de prueba para detener a los supuestos agresores de Rosita.

Al término del encuentro de casi una hora, Natalia Borla y Sandra Ponce señalaron que la investigación sigue su curso y está muy lenta porque no hay elementos suficientes para imputar a las personas que habrían despellejado a Rosita, a mediados de abril, en barrio Alberdi.

Borla dijo que, si bien hay algunas pruebas, no son suficientes para detener a las personas responsables del acto de crueldad a Rosita.

“No es fácil porque son personas que están en la clandestinidad y han delinquido”, expresó Ponce. Indicó que los agresores estarían identificados pero faltan testigos que puedan aportar información sobre el hecho.

En cuanto a la causa por las lesiones sufridas por la galgo Adelia en el mismo sector de barrio Obrero, la causa es investigada por el fiscal Fernando Moine.

En tanto, el abogado Emiliano Perotti Ghi, quien participó de la reunión con Di Santo, dijo que el fiscal les informó que hay mucho miedo de la sociedad para sumar elementos y poder esclarecer el caso, pero “han demostrado que la investigación avanza”.

Por su parte, integrantes de protectoras de animales que acompañaron el reclamo de Justicia lamentaron que los agresores sigan libres y que van a seguir cometiendo hechos contra perros.

“Pedimos que nos aporten datos, anónimamente, a través de alguna página, que nos contacten y nos den información. La gente tiene miedo de hablar”, expresaron.

“Me preocupa como ciudadana que estas personas no estén detenidas y que no haya justicia al respecto”, lamentó otra de las participantes.