Nuestra prioridad es estar todos juntos en familia”, dice Sabrina Garciarena (33). Y es que el 22 de mayo nació Beltrán, fruto de su amor con Germán Paoloski (43), y la plenitud de la familia se duplicó. “Estamos muy felices, no nos importa el caos de la casa, con Germán nos dividimos las tareas y disfrutamos de este momento de pura alegría”, cuenta la actriz, quien ya es mamá de León (3) junto al periodista y conductor. 

–¿Cómo tomó León la llegada de su hermano?

–Fue raro, porque durante todo el embarazo no quería saber nada con que iba a tener un hermano. Yo le decía: “Mamá tiene un bebé en la panza”. Y él me respondía: “No, mentira”. Era como un juego que teníamos. Después, cuando nació Beltrán, quería llamar la atención todo el tiempo. Igualmente, nosotros estamos muy atentos y queremos que se sienta parte de este momento para que no le dé celos.

–¿Siempre soñaste con formar tu propia familia?

–Desde chica sabía que quería tener hijos, pero nunca pensé cuántos iba a tener. Para mí dos ya es un lindo número, pero depende de cómo vaya la vida, tal vez en un futuro me anime a uno más. Por ahora estamos bien así.

–¿Cómo transitaste el embarazo?

–Muy bien, no me sentí mal en ningún momento. Sólo tuve dolores en el posparto por la cesárea. Pero ahora estoy como nueva. Como a León le gusta pintar, ir a la plaza y hacer de todo, nos tiene ocupados todo el día.

–A un mes de haber dado a luz, se te ve espléndida.

–Durante el embarazo caminé mucho, entrené con un personal trainer e hice una dieta para embarazadas con gimnasia controlada. Engordé dieciséis kilos, lo mismo que con León. Ya bajé diez, lo que queda es retención de líquidos.

–¿Cómo te definirías como mamá?

–Me gusta estar presente. A León le di teta durante dos años y medio, me parece prioritario los primeros meses estar pegada al bebé si se puede. Ahora, con dos hijos, hay que organizarse bien: el más grande demanda actividades y al más chico se lo “carga” para todos lados.

–¿Cómo hacés para dividir tu tiempo entre mamá y actriz?

–Con organización y ayuda. Ahora estoy en casa recuperándome y ya empiezo a planificar qué voy a hacer. Trato de no irme tantas horas de casa, armar los horarios con Germán, pero nunca dejo de hacer gimnasia y tengo tiempo para mi trabajo. Este año seguramente me lo voy a tomar para hacer gráficas y recién en 2018 volver con todo a la actuación. Hoy mi prioridad es estar con los chicos.

–¿Qué tal es Germán como papá?

–Muy bueno. Estoy feliz de que nos elijamos día a día y tengamos los mismos proyectos. Ger y León están en un momento de mucho apego.

–¿Cómo festejaron el Día del Padre?

–Generalmente, tanto en este día como en el Día de la Madre, nos corremos de nuestro lugar y aprovechamos para mimar a nuestros viejos. Primero almorzamos con mi papá y después tomamos el té con la familia de Ger.


Revista Hola