La criatura tiene 17 meses. Sobrevivió al terrible accidente ferroviario que sufrió su madre al ser arrollada por una formación.
El pequeño ignora lo que le pasó a su mamá. Se acerca al cuerpo de la mujer, lo abraza y comienza a beber su leche. “Nos sorprendió verlo, fue muy triste. La mujer estaba muerta mientras el niño estaba sentado a su lado. Esto era algo que no habíamos visto antes”, contó un policía muy conmovido con lo que había visto.
El niño fue llevado a un centro asistencial para que reciba atención médica.
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