La Policía y la Guardia Nacional disolvieron con gases lacrimógenos y balas de goma una marcha organizada en el centro de Caracas para pedir la realización de elecciones. Fue el quinto día de disturbios en el país.
Al menos 57 personas resultaron heridas o lesionadas y 18 fueron detenidas hoy en Caracas, donde efectivos de la Policía y la Guardia Nacional de Venezuela disolvieron con gases lacrimógenos y balas de goma, por quinta vez en diez días, una marcha opositora que aspiraba a llegar hasta el centro de la ciudad para protestar contra el gobierno y reclamar la realización de elecciones.
Paralelamente, un alto oficial del Ejército que fue jefe de inteligencia con el presidente Hugo Chávez y ministro de Interior y Justicia con el actual mandatario, Nicolás Maduro, reclamó un calendario electoral para evitar "más violencia en la calle".
Los uniformados recurrieron al uso de bombas de gas lacrimógeno y balas de goma para impedir que los miles de manifestantes ingresaran esta mañana en el municipio Libertador, donde está la zona céntrica de Caracas y los edificios que albergan a las principales oficinas estatales.
Fue el quinto día de disturbios en Venezuela por la movilización convocada desde la oposición para exigir la destitución de magistrados del Tribunal Supremo de Justicia luego de la decisión de asumir los poderes de la Asamblea Nacional y los enfrentamientos llegaron a un escenario distinto a las calles.
Bajo la consigna "No más dictadura", los manifestantes se congregaron antes de las 10 en la plaza Brion, en Chacaíto, una zona de transferencia de transporte de pasajeros usualmente muy concurrida, en el municipio Chacao del este de la capital.
"Aquí lo que hay es represión, más nada; el gobierno sigue el paquete del autogolpe; creen que así, con represión, es la forma de resolver la crisis", sostuvo el gobernador del estado Miranda y ex candidato presidencial, Henrique Capriles.
En diversos hospitales de Chacao fueron atendidos al menos "12 heridos provenientes de la manifestación de hoy", informó el alcalde, Ramón Muchacho, en su cuenta de Twitter.
En tanto, en los centros de salud del vecino Baruta se prestó auxilio a 45 personas, algunas por "asfixia producto de las lacrimógenas" y otras por "algunos traumatismos", reportó Blyde al canal Globovisión.
El periodista Román Camacho sufrió la fractura de la tibia izquierda al recibir el impacto de una bomba de gas lacrimógeno, informó el sitio web de noticias La Patilla, donde la víctima trabaja como reportero gráfico.
La diputada Delsa Solórzano, del partido Un Nuevo Tiempo de la Mesa de la Unidad Democrática, denunció que fue impactada por una bomba lacrimógena en una autopista disparada por la Guardia Nacional. A través de una grabación suministrada a CNN en Español por el equipo de prensa de la diputada, Solórzano fue trasladada hacia la Policlínica Las Mercedes, a donde varios diputados fueron a visitarla.
Según Solórzano, al ver la presencia de opositores en el centro médico, "la Guardia Nacional de Venezuela llegó a la Policlínica Las Mercedes y empezó a disparar bombas dentro de la emergencia de la cínica. Y decían 'Esto es para que sigan atendiendo diputados allá adentro'. Lo más grave de todo no es cuánto me afectó a mí, mi salud, sino que había aun bebé dentro de la clínica que tuvieron que sacarlo para asistirlo en otro centro de salud porque se vio fuertemente afectado por el efecto de las bombas lacrimógenas disparadas por la Guardia Nacional dentro de la Clínica".
Luis Montañez, especialista en cirugía y oncología del Centro Profesional Las Mercedes, otra institución de salud en la misma zona, dijo: "Tiraron dos bombas lacrimógenas y empezaron a tirar municiones dentro de la clínica. Esto es plomo (...) Hay un niño todavía con cuadro asmático trancado allá arriba, un niño de un mes. Esto es violación de derechos humanos. ¿Cómo van a atacar una clínica?".