Este miércoles 15 de marzo los holandeses irán a las urnas en una elección que será observada de cerca como un barómetro sobre el populismo en Europa.
La campaña, dominada por la inmigración y la adhesión a la Unión Europea, ha enfrentado al liberal actual primer ministro Mark Rutte y al populista de extrema derecha Geert Wilders.
De acuerdo con los últimos sondeos, ambos están prácticamente empatados. Pero incluso si Wilders obtiene más votos que Rutte, es poco probable que sea el próximo primer ministro holandés.
Esto es lo que necesitas saber sobre estas elecciones clave en Europa:
¿Quiénes son los actores clave?
Wilders, llamado el "Donald Trump holandés", ha protagonizado un meteórico ascenso desde los márgenes políticos hasta ser el favorito.
Se dio a conocer internacionalmente en 2008 con la provocadora película en internet Fitna, que yuxtapone las consecuencias de los ataques terroristas con versos del Corán.
Como líder del Partido de la Libertad (PVV), Wilders quiere frenan la inmigración desde países musulmanes, cerrar las mezquitas, prohibir el burka y encarcelar de forma "preventiva" a los musulmanes radicales que no han cometido crímenes.
Wilders, de 53 años, también ha prometido un referéndum sobre la adhesión de los Países Bajos a la UE, tras el brexit de Gran Bretaña el año pasado.
Su mayor amenaza es el actual primer ministro Rutte, quien ha promocionado la estabilidad económica del país bajo el gobierno de su partido, el Partido Popular para la Libertad y la Democracia (VVD).
La Comisión Europea prevé que la economía holandesa crecerá de forma constante en torno al 2% este año, superando a la UE en su conjunto.
Rutte, de 50 años, busca su tercer mandato. Para competir con Wilders, parece que se ha posicionado a sí mismo a la derecha, en lugar de presentarse como el opuesto al líder populista.
En enero, Rutte escribió una carta abierta en la que dijo que los inmigrantes que no se integren en los Países Bajos deben "comportarse normalmente, o irse".
Aunque no está de acuerdo con Wilders en salir de la UE, dijo que el concepto de una unión cada vez más estrecha estaba "muerto".
¿Cuáles son los temas claves?
Los solicitantes de asilo y la inmigración, la pertenencia a la UE, y el crimen y la seguridad son los temas más importantes en esta elección.
El electorado también se ha centrado en las libertades civiles, tales como la privacidad, la libertad de perfiles raciales y los controles policiales en las calles.
"Estos temas están todos relacionados. Solicitantes de asilo, derechos civiles y libertades están, por supuesto, relacionados con la UE. Crimen y terrorismo, y se habla de recuperar el control. Todas estas cuestiones son cuestiones de la derecha que han dominado por completo la discusión. Hubo poco espacio para los temas de izquierda", explica Andre Krouwel de la Vrije Universiteit de Amsterdam.
Pero más allá de las fronteras holandesas, el apoyo a Wilders es motivo de preocupación, especialmente si llega a ser primer ministro y sostiene su prometido referéndum.
Después de que Gran Bretaña votó por retirarse del bloque, otros países miembros han amenazado con votaciones similares debido a las preocupaciones sobre la inmigración.
¿Wilders podría ser primer ministro?
Es improbable.
Incluso aunque Wilders obtenga más votos, ningún partido va a ganar una mayoría suficiente para formar un gobierno en solitario. Una coalición es inevitable.
En esta situación, el Parlamento podría dar a Wilders el derecho a tratar de formar una coalición, pero él simplemente no tiene aliados, dijo Krouwel.
Los partidos holandeses hanindicado que no iban a dar su apoyo a Wilders, y los que han contemplado la idea dijeron que sólo lo harán si abandona su postura antiinmigración, la pieza central de su retórica.
Parece más probable que el partido de Rutte, aunque quede en segundo lugar, es probable que sea capaz de formar una coalición y mantenerse en el poder.
Con todo, se espera un largo proceso de negociaciones para formar gobierno. Lo normal son tres meses, y en el pasado, las alianzas más complejas han tardado siete meses en formarse.
Mientras que eso ocurre, el Gobierno actual se mantiene en el poder, aunque no podrá introducir fácilmente nuevas políticas en el Parlamento.