El ex titular de la AFI se refirió a la filtración de las nuevas escuchas: "Se trata de conversaciones privadas en las que uno usa términos personales", aseguró.
Oscar Parrilli volvió a quedar en el ojo de la tormenta. Tras la filtración de una nueva escucha en la que Cristina Kirchner le ordena "salir a apretar a jueces", el ex titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) negó que el gobierno kirchnerista haya presionado a la Justicia y sostuvo que la ex presidenta es víctima de una "campaña mediática de desprestigió".
"Se sigue cometiendo un delito que es la filtración de las comunicaciones. No es que lo cometen los periodistas, sino que los delincuentes son los que han dejado trascender estas escuchas", afirmó el ex funcionario en diálogo con Radio Rivadavia.
Anoche, el programa La Cornisa conducido por Luis Majul, dio a conocer una nueva conversación telefónica entre la ex mandataria y Parrilli. Las escuchas fueron ordenadas el año pasado en el marco de una causa contra el ex jefe de los espías por supuesto a encubrimiento a Ibar Pérez Corradi.
En el fragmento que se difundió ayer, la ex presidenta le pide a Parrilli que salga a "apretar" a jueces. "Se trata de una conversación privada en la que uno utiliza términos que son propios de las relaciones personales", se defendió.
Y añadió: "Cuando ella dice «apretar» es hacer lo que siempre hicimos que es reclamar y exigirles a los jueces que investiguen a Stiuso, que es lo que estábamos conversando".
Según Parrilli, la ex jefa del Estado se refería a exigirles a los magistrados que aceleren las causas que se iniciaron a raíz de las denuncias presentadas por la administración kirchnerista contra el ex espía.
"Cuando la presidenta me dice eso [apretar] lo que se trata era de reclamar y exigir que esas causas avancen y se llegue a algún resultado", aseveró. "Pero es como cuando dice «matalo», no es matalo, es hacer declaraciones y contar lo que es", apuntó.
Respecto de la difusión de los audios, Parrilli volvió a apuntar contra Ariel Lijo, el juez que ordenó la intervención de su teléfono; el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, a cargo de la dirección que lleva adelante las escuchas; y las nuevas autoridades de la AFI, Gustavo Arribas y Silvina Majdalani. "Utilizan esto para seguir adelante con esta campaña mediática de desprestigio contra la presidenta", indicó.
El juez federal Rodolfo Canicoba Corral tiene a su cargo la investigación por las filtraciones de las conversaciones entre el ex titular de la AFI y Cristina Kirchner. "Estuvieron nueve meses pinchando los teléfonos y no encontraron nada", insistió Parrilli.
En ese marco, el ex secretario general de la Presidencia negó que la administración kirchnerista haya "apretado" a la Justicia.
"¿Saben quién aprieta a los jueces? El Ejecutivo actual. Dicen que van a pedir la remoción de Freiler y Rafecas", aseguró.