Pertenecer a una de las familias más mediáticas del mundo tiene muchos privilegios... y algunas desventajas. Khloé Kardashian lo vivió en carne propia cuando tuvo que vivir un divorcio conflictivo con un ex basquetbolista y tuvo que soportar que todos comentaran sobre su vida privada. Pero, fiel al estilo de su clan, transformó el dolor en negocios y ahora ayuda a otros a superar un corazón roto con el reality show Revenge Body With Khloe por la pantalla de E!.
Nunca fue ni la más llamativa ni la más escandalosa de la familia y quizás por eso algunos medios estadounidenses, ansiosos por encasillarla en algún molde, la tildaron de "la patito feo" de la familia, supuestamente lejos de la belleza de Kim. Por eso cuando le pidió por segunda vez el divorcio a su esposo Lamar Odom , ex estrella de básquet involucrado en problemas con drogas, también tomó la decisión de reinventarse.
La transformación, que fue anticipada en sus populares redes sociales, fue criticada de inmediato porque lleva a pensar que la manera de superar un mal momento es adelgazar y tener una mejor cola, algo que sus seguidores le hicieron notar en infinidad de comentarios en Instagram y Twitter.