Ayer martes el secretario de Gobierno de la Municipalidad local, Mauricio Dova,
acusó duramente a la oposición manifestando que tienen pruebas concretas de que “han sido militantes del partido de la primera oposición los que difundieron la situación vinculada a la posible contaminación del agua”.
Sin embargo, este miércoles el titular del radicalismo, Gabriel Abrile, salió al cruce y sentenció que “esto de la teoría conspirativa lo que hace es tirar hacia afuera los problemas de gestión”.
“Me parece poco serio que un Estado municipal busque capturas de WhatsApp para hacer denuncias. Lo que hacen es esconder problemas de gestión”, expresó el dirigente. Y agregó: “Es una falta de respeto tratar a los dirigentes de la oposición como parlanchines” -otra de las acusaciones que había realizado Dova-.
A su vez, descartó completamente que hayan sido militantes del partido quienes difundieron las versiones sobre la contaminación del agua. “Desde lo institucional el radicalismo lo niega rotundamente, no vamos a permitir semejante cosa”.
Por otra parte, Abrile indicó que el oficialismo “tiene que entender que no es el único partido político que hay en Río Cuarto”. “Nosotros fijamos nuestra posición con el máximo de los respetos. La oposición no es responsable que el Intendente haya dicho que iba a mantener gente que después termina echando. No somos responsables que hayan dicho que en tres meses solucionaban lo de los baches y no esté solucionado. Tampoco de que Cotreco se iba y ahora se está poniendo el saco para quedarse”.
“El radicalismo tiene muchos años de ser oposición y sabe cómo serlo. A ellos les falta aprender a ser oficialismo”, finalizó.