El intendente de Huinca Renancó, Oscar Saliba, luego de la catástrofe climática, repasó el saldo de los daños. Señaló que, en la parte urbana, resultaron totalmente deterioradas más de 300 viviendas, principalmente afectó a las familias más vulnerables de la localidad.

“El pueblo ha quedado destruido, mugriento, sin arbolado y el pavimento seriamente afectado, es muy compleja la situación, Huinca muestra un panorama desolador”, indicó el intendente.

Respecto a la zona rural afirmó que más de 20 mil hectáreas están bajo el agua, principalmente al sur. “Hay caminos totalmente anegados, la piedra se llevo lo sembrado y mató animales chicos”, indicó Saliba.


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