La primavera es una de las cuatro estaciones de las zonas templadas de nuestro planeta, posterior al invierno y anterior al verano. El término prima proviene de «primer» y vera de «verdor». Astronómicamente, esta estación comienza con el equinoccio de primavera (entre el 20 y el 21 de marzo en el hemisferio norte, y entre el 21 y el 23 de septiembre en el hemisferio sur), y termina con el solsticio de verano (alrededor del 21 de junio en el hemisferio norte y el 21 de diciembre en el hemisferio sur). En la zona intertropical del hemisferio norte comienza el 21 de marzo hasta el 23 de septiembre. En la zona intertropical del hemisferio sur va desde el 23 de septiembre al 21 de marzo.
Hay varias definiciones técnicas de la primavera, pero el uso local del término varía según el clima local, las culturas y costumbres. Cuando es primavera en el hemisferio norte, será otoño en el hemisferio sur. En el equinoccio de primavera, los días son aproximadamente 12 horas de duración aumentando la duración del día conforme avanza la temporada. En lo que respecta al clima, suele ser frecuente el aumento lento y progresivo de las temperaturas conforme avanzan las semanas, con algún período intercalado en el que puede "reaparecer" el ambiente invernal debido a algunas masas de aire frío residuales. Las precipitaciones tienden a ser más irregulares y menos generalizadas, descargando en forma de chubasco y tormentas más probables a mediados y finales de la estación, cuando el verano está próximo. Las hojas y flores de los árboles de hoja caducifolia vuelven a crecer de manera gradual, dando colorido de nuevo al paisaje después del invierno.
La primavera también puede referir a las ideas del renacimiento, el rejuvenecimiento, la renovación, la resurrección y el nuevo crecimiento. En la literatura, la primavera representa la juventud, época o fase la vida de una persona en la que se dice que está en la "flor de la vida".