Triumph está en Bonneville para intentar superar las 400 millas por hora
Los récords están para ser batidos, dice un viejo refrán que utilizamos cada vez que se rompe uno de ellos. Y no deja de ser real. Todas las marcas constituyen un desafío para ir más allá de lo establecido.
Así lo entiende la tradicional marca inglesa de motocicletas Triumph, que acaba de anunciar que con su streamliner (un verdadero cohete a ras del piso) Triumph Infor Rocket intentará batir el récord mundial de dicha categoría (la más rápida para vehículos de dos ruedas), que es de 376,363 mph (605,697 km/h). Pero el intento quiere ir más allá: el objetivo es superar la barrera de las 400 millas por hora (643,738 km/h).
Con una historia en la que ostentó el título de la motocicleta más rápida del mundo entre 1955 y 1970; ahora, Triumph se alió con Matt Markstaller y Bob Carpenter para liderar un equipo capaz de recuperar su primacía en los libros de historia de los récords de velocidad. Markstaller es ingeniero en aerodinámica, mientras que Carpenter es desarrollador de motores de altas prestaciones. Al comando del Triumph Infor Rocket estará el carismático Guy Martin, uno de los emblemas del Road Racing (TT de la Isla de Man, North West 200 y el Ulster GP, entre otras carreras).
El equipo ya se encuentra en Bonneville (Utah), famoso salar con una superficie de más de 60.000 m2. De hecho, en una prueba el martes último, este cohete se transformó en la moto Triumph más rápída de todos los tiempos al marcar un registro de 274,2 mph (441,28 km/h).
El Triumph Infor Rocket se destaca por su construcción con un carenado monocasco de Kevlar y fibra de carbono. Cuenta con dos motores de la Triumph Rocket III turboalimentados que generan más de 1000 CV de potencia. Con 7,8 metros de largo; 0,6 m de ancho y 0,9 m de alto es un auténtico misil sobre dos ruedas alimentado con metanol, que competirá por el récord en la Categoría C de motocicletas streamliner.