Alfredo Cardosso, productor de San Basilio se refirió al aumento a los productores tamberos y dijo que Cardoso comentó que el panorama en el sector lechero sigue siendo preocupante y es más grave en aquellos campos donde están afectados por las lluvias.

Sobre la propuesta dijo: "Ha sido de emergencia como para seguir estudiando la cadena láctea. Nos hemos reunido con el ministro de Agricultura y tenemos 60 días para trabajar en una propuesta a largo plazo para mejorar la situación".

El Gobierno nacional insistirá en su mensaje de apoyo al sector productivo: se eligió una localidad del interior como cuando fue el anuncio de la quita de retenciones en Pergamino; está previsto que el acto esté encabezado por el presidente Mauricio Macri, acompañado por integrantes del equipo económico: el ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, el secretario de Agricultura, Ricardo Negri, y el subsecretario de Lechería, Alejandro Sammartino; los titulares de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay; y de Producción, Francisco Cabrera. 

Además, habrá un representante de los gobiernos de las provincias productoras (por Córdoba, el ministro de Agricultura, Sergio Busso), dirigentes de las entidades tamberas incluida la cordobesa Caprolec, y directivos de Apymel, la Junta Intercooperativa de Productores de Leche y el Centro de la Industria Lechera (CIL).
 
Solución exportadora

A la hora de evaluar por dónde pasa el problema, Leveratto repitió una frase que suele usar para explicar la situación: “El tema es, ¿quién se toma toda la leche? Lo estructural es que somos superavitarios de leche, entonces cualquier crecimiento tiene que estar enfocado exclusivamente en la exportación”. En el país se producen unos 11.500 millones anuales de leche (250 litros por habitante por año) y se consumen 8.500 millones (210 per cápita). Con esos números, asoma difícil poder aumentar el consumo interno en esa envergadura y por eso el camino es el mercado externo. 

En ese diagnóstico no sólo coincide el Gobierno sino también la industria. “El puente del que habla Sammartino es para cruzar un charco cuya extensión nadie conoce. En la industria, por más devaluación que tengamos, si el precio internacional no se mueve, no sirve”, graficó una fuente empresarial. Y las noticias no son buenas: la última licitación de Fonterra arrojó una baja del 1,6 por ciento en el precio promedio de los productos lácteos y del 4,4 por ciento para la leche en polvo. Además, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ubicó a la leche como el alimento que más redujo su precio en 2015: 28,5 por ciento. Asimismo, la demanda mundial no está en sus mejores niveles: la esperanza es una licitación de Argelia, negociar otro acuerdo con Venezuela y recuperar algo del mercado brasileño.

   

Más ventas a Brasil

Apymel. La Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas informó que su presidente Pablo Villano formó parte de la comitiva de Argentina que viajó a Brasilia para solicitar el incremento del cupo de exportación de leche en polvo al país vecino. 

Incremento. La entidad aseguró que se obtuvieron unas 900 toneladas adicionales por mes respecto de las 3.600 toneladas acordadas, “pero con una fórmula tramposa para así no dar una ampliación de cupo”. 

Déficits. La fórmula parte de usar todos los déficits mensuales de 2015 –que Argentina, por cuestión de precios y negocios no cumplió– y sumarlos a los meses venideros, pero repartidos mensualmente y sin superar las 4.500 toneladas.

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