Un huevo de un metro de largo y dos metros de diámetro fue hallado el viernes pasado en un arroyo que atraviesa un campo, cerca de Ezeiza, y se investiga si corresponde a un gliptodonte prehistórico.
"Yo lo vi desde la ruta cuando pasaba y pensé que era una parte de un vehículo", contó José, la persona que lo encontró, en diálogo con TN. El hombre dijo que cuando se acercó y empezó a cavar pensó que era una piedra, "pero a medida que avanzaba fue apareciendo el huevo, y cavé y cavé primero con una pala y después con las manos", relató.
Una vez hecho el descubrimiento, la dueña del campo de cinco hectáreas donde estaba el "huevo" alertó a la policía. No obstante, lamentó que ningún equipo científico se haya hecho presente en el lugar, ya que el "huevo" comenzó a resquebrajarse tras haber sido dejado a la intemperie, sin el barro que lo cubrió hasta ahora.
"Parece un resto fósil prehistórico. Se observa un caparazón completo, que podría ser un gliptodonte, que vivió en la zona pampeana, desde dos millones de años atrás a 10.000 años", dijo la paleontóloga Laura Cruz en base a las imágenes televisivas.
La especialista dijo que "el caparazón es impresionante porque está completo".
Recordó que los gliptodontes, antepasados de los armadillos, son "parte de la megafauna que vivió en el continente" sudamericano, eran herbívoros y llegaron a pesar una tonelada.