Pocos días después de la conferencia climática de París, será inaugurada a las puertas del Sahara la primera fase del megaproyecto Noor, presentado por Marruecos como el mayor parque solar del mundo.
Obreros e ingenieros se movilizan estos días para que el inmenso parque en el centro del país, a 20 km de la ciudad de Ouarzazate, sea operativo antes de fin de año.
"Las obras ya finalizaron. Ahora probamos los componentes de esta unidad de producción para conectarla con la red nacional de energía", explica Obaid Amran, de la Agencia de Energía Solar marroquí.
El parque tendrá una capacidad de producción de 580 megavatios (MW). "El mayor complejo de energía solar del mundo", según sus responsables, suministrará energía a un millón de hogares.
Noor 1 será además una vitrina para Marruecos, anfitrión a fines de 2016 de la 22° Conferencia Mundial Sobre el Clima, en la que se examinarán si se empezaron a aplicar los compromisos históricos adoptados anteayer por la COP21 en París (ver aparte).
El reino es rico en exposición al sol y esto le ha permitido desarrollar un ambicioso plan de energías renovables que debe permitirle cubrir el 42 por ciento de sus necesidades energéticas en 2020. Noor 2 y Noor 3 se inaugurarán en 2016 y 2017 y la fase Noor 4 ya se abrió a concurso.
Noor 1 abarca 450 hectáreas y está formado por medio millón de espejos con forma de cilindro parabólico y 12 metros de altura, distribuidos en 800 hileras. Lentamente, estos siguen el movimiento del sol, haciendo converger sus rayos para calentar un fluido caloportador que hace funcionar una turbina a vapor.
Solo el Noor 1, con una capacidad de producción de 160 MW, reducirá de forma importante las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de Marruecos. Las cifras hablan por sí solas: el complejo permitirá evitar la emisión anual de 240 mil toneladas de CO2, y de 522 mil toneladas cuando el Noor 2 y el Noor 3 estén operativos. Marruecos también inauguró en 2014 en Tarfaya el mayor parque eólico de África (300 MW).
Rabat se comprometió a reducir el 32 por ciento de sus emisiones de GEI de aquí a 2030.