La licenciada en kinesiología Noelia Belén Díaz explicó que una paciente que ha tenido una cirugía por un tratamiento de cáncer de mama presenta una incisión con una cicatriz que retrae la piel y limita la funcionalidad del hombro. Y como consecuencia de eso padece dolores de espalda y cervicales, y si eso no se previene se puede provocar un linfedema.

El linfedema es la acumulación de linfa en el miembro superior. Con el tratamiento por el cáncer de mama se tocan los gángleos linfáticos, eso no permite que el linfa siga su curso normal y la paciente necesita drenaje linfático para a dar movilidad.

Díaz consideró que a los dos o tres días de operada, la paciente debería iniciar un tratamiento kinesiológico para empezar a mover el hombro y evitar este problema a futuro, porque si se llega tarde es muy difícil revertir la situación.

Desde el Colegio de Kinesiólogos de Río Cuarto invitan a la charla para todo público sobre tratamiento post quirúrgico de cáncer de mama que se realizará el viernes 2 de octubre en el auditorio de Cervantes de 18 a 19:30.

Además, los días 2 y 3 de octubre, el colegio propone un curso de capacitación sobre tratamiento post quirúrgico de cáncer de mama para profesionales de la salud, para mayor información dirigirse al Colegio de Kinesiólogos de Río Cuarto, Ituzaingó 741.