Los mercados de granos no se escapan de la crisis financiera a nivel global, todos los activos se devalúan y los granos no son la excepción.
Los operadores tienen la mirada puesta en el Pro Tour Crop Farmer Midwest, recorrido que realiza un grupo de productores para evaluar el estado de los cultivos en el país del norte. Los resultados son bastantes dispares, las condiciones del tiempo en el desarrollo de los cultivos se encargo que la cosecha se encuentre bastante despareja esta año, y llueven twits, videos, y noticias de los viajeros que inclinan la balanza hacia las bajas, sin embargo resulta prudente que se conozca el informe final el fin de semana donde se ponderen todas las variables.
Esta caída de los precios provoca que los fondos de inversión vendan posiciones compradas y se potencien las bajas. Las caídas en los precios de los granos generan ventas de pánico de productores que piensan que puede seguir bajando y entramos en un espiral descendente en la búsqueda de nuevos pisos, ayer la soja tuvo la menor cotización en Chicago de los últimos seis años, operando debajo de los 900 centavos por bushel, u$s 330,66 por tonelada.
El maíz se resiste y mostró mayor firmeza en las cotizaciones con subas imperceptibles en las posiciones cortas del Chicago Mercantil Exchange.
En un mercado donde no existen señales técnicas que le otorguen soporte a los precios necesitamos de noticias fundamentales para que las cotizaciones mejoren. Solo podremos encontrar noticias de este tipo por el lado de la oferta, ya que las condiciones económicas globales nos hacer pensar en una demanda debilitada, teniendo en cuenta que China se ha consolidado como el principal importador de soja.
Tendremos que esperar la recolección de los primeros lotes en Estados Unidos para tener una idea certera de los números de la producción americana, mientras tanto solo tenemos conjeturas o suposiciones.
Si se confirman los rindes informados por el departamento de Agricultura de Estados Unidos, los precios seguirán deprimidos al menos hasta que exista preocupación por los cultivos del hemisferio sur. Tendremos que esperar la época de implantación para ver la reacción de los operadores.
Una estimación más cercana a los pronósticos de los analistas privados, es decir una marcada disminución en los rindes ocasionaría una pronta recuperación. Mientras mayor resulte el ajuste, más rápida la reacción al alza que seguro será acompañada con compras de fondos de inversión.
Generalmente esta situación de mercado nos paraliza y salvo que debamos vender para cancelar compromisos financieros nos quedamos esperando que los precios mejoren. Tenemos razones para pensar que esto debería ocurrir, pero no la certeza.
En estos casos debemos tener en cuenta que los precios de noviembre en Argentina para la soja cayeron menos que en Estados Unidos, que dichos precios muestran un premio con respecto a los americanos; y por último que si nos equivocamos con la percepción del comportamiento de las cotizaciones podemos desarmar las coberturas o tomar coberturas al alza para otorgarle flexibilidad a la estrategia, en definitiva de eso se trata si hablamos de coberturas, protección ante los precios bajos que anulan la rentabilidad agrícola.