Las tareas que encabezó Ríos, acompañado por la fiscal Paula Asaro, incluyeron un allanamiento en un departamento desocupado, el tercero "A", y otro en el domicilio del portero Jorge Mangeri, según contó su abogado Héctor Biondi, al término del procedimiento, que se extendió por cinco horas.

También se tomaron muestras de rastros de sangre que dieron resultado negativo respecto a ser de humanas, sostuvo Biondi, que dijo que en la noche en la que presuntamente fue asesinada Ángeles, el portero estaba viajando en automóvil rumbo a la localidad bonaerense de Pacheco y agregó que pedirá los videos de los peajes para ratificarlo.

El magistrado que entiende en la causa, en la que está procesado Mangeri, de 45 años, ingresó a las 18:30 al edificio acompañado de varios funcionarios judiciales y policiales para realizar la inspección, que se prolongó hasta pasadas las 23:30. Participaron también los abogados de la querella y de la defensa.

En ese inmueble Ángeles Rawson estuvo por última vez y la Justicia fue a inspeccionar los posibles lugares en donde eventualmente podría haber sido atacada, como aquellos que frecuentaba el portero. “Buscaron fluidos y elementos de la víctima.  Se hicieron pericias en la terraza y se llevaron para analizar dos rastros de sangre”, detalló Biondi  al tiempo que aclaró que “no son de sangre humana”.

Uno de los departamentos que el juez allanó fue el del tercero "A", donde se sospecha que pudo haber sido oculto el cuerpo de Ángeles, ya que se encuentra desocupado desde hace siete años y el portero del edificio tenía las llaves de algunos de los inmuebles.

Otro de los lugares que también se inspeccionó en el edificio fue, en especial, el sótano: una de las hipótesis que manejan los investigadores es que allí es donde Ángeles podría haber sido atacada.

Ayer también, pero más temprano, el juez tomó declaración durante siete horas a un nuevo testigo, que se presentó ante la fiscalía. Se trata de otro taxista, que dijo haber llevado a un hombre muy similar a Mangeri el lunes del ataque con dos paquetes hasta la Ceamse del barrio porteño de Colegiales, desde donde partió el cuerpo de la adolescente, de 16 años, hacia el predio de José León Suárez.

Tras una jornada extensa en materia investigativa, hoy Ríos deberá definir la situación procesal de Mangeri, quien se negó ayer a declarar por  tercera vez ante él. Sólo repitió que fue “apretado” por la Policía para autoincriminarse.

Se cree que Ríos le dictará la prisión preventiva a Mangeri por "homicidio simple", ya que una de las principales pruebas que lo comprometen con la muerte de Ángeles son los resultados de ADN encontrados en tres uñas de la víctima.

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