La marcha de la industria le depara al Gobierno un final de ciclo que en otro momento podría haber parecido inverosímil. La actividad en las fábricas, una de las más importantes banderas de la gestión kirch-nerista, sufrió en mayo pasado el 22° mes de caída consecutiva.
Según los números que difundió ayer el Indec, el estimador mensual industrial (EMI), que mide la actividad en las fábricas, cerró el quinto mes del año con una baja de 0,9% respecto del mismo período de 2014. Si se toma el acumulado de los cinco primeros meses del año, la caída fue de 1,7% respecto del mismo lapso de 2014. La situación es peor si se toman los datos de FIEL. Según la consultora, la caída fue de 3% en mayo, y de 3,6% en el acumulado de 5 meses.
Las cifras dejan al Gobierno a las puertas de un récord. No sólo es el peor comportamiento del sector bajo la conducción del kirchnerismo (en 2012 hubo 9 meses de caída consecutiva), sino que ya completó la mayor parte del camino para alcanzar la marca del crítico año 2000.
En agosto de ese año, en el gobierno de Fernando de La Rúa, el sector comenzó un período de 27 meses de caída consecutiva. La tendencia se invirtió recién en noviembre de 2002, durante la presidencia de Eduardo Duhalde y con Roberto Lavagna al frente del Ministerio de Economía.
Según la evaluación de FIEL, en lo que va de este año "se marca un patrón diferenciado en la producción de bienes de consumo no durables [de mejor performance, crecen 3,9%] de la de bienes durables [caen 13,2%]", señala en su informe de esta semana. Y concluye: "La mejora en el nivel de actividad continúa expuesta a desafíos sectoriales particulares. En este escenario, las señales de reversión de la recesión se muestran débiles".
Para Fausto Spotorno, economista jefe del estudio de Orlando Ferreres, hay que buscar los motivos del estancamiento dentro y fuera del país. En el plano doméstico, menciona una "incapacidad para crecer debido a la falta de inversiones", así como un "problema de la calidad" de las inversiones que se concretan. "Por ejemplo, hay problemas energéticos, por lo que muchas empresas invirtieron en generación para esquivar los cortes antes que en su propio negocio. También faltan puertos. Si quisieras exportar más granos, no tendrías cómo sacarlos", resumió. El informe de Ferreres marcó caídas de 0,9% en mayo y de 0,7% en el acumulado de 5 meses.
"Se está viendo que después de una caída importante el año pasado, que promedió el 3%, lentamente la industria deja de caer porque la base de comparación ya es muy baja. El problema es que no termina de repuntar. Esperamos una caída anual de 0,5%", explicó Diego Coatz, economista jefe de la Unión Industrial Argentina (UIA).
El tipo de cambio es otro de los lastres para la industria, algo en lo que coinciden empresarios y economistas. "En la región, hoy casi no hay mercados más caros que el argentino para exportar", explicó Spotorno.
Además, Brasil, el principal socio comercial de la Argentina, enfrenta su peor recesión en 24 años. Quizá ninguna como la industria automotriz local sufra en sus propios números esas consecuencias. En enero, las terminales argentinas pensaban producir unas 680.000 unidades este año, pero redujeron ese pronóstico un 10%, principalmente por la menor demanda de Brasil, principal destino de exportación de las fábricas instaladas aquí, cuyas ventas al exterior cayeron 24% hasta mayo.
"En enero se empezó a desacelerar la demanda de ese país. No esperamos una rápida recuperación", sostuvo días atrás Isela Costantini, presidenta de Adefa (que reúne a las fábricas de vehículos instaladas en el país) y CEO de GM en el Salón del Automóvil.
El Indec explicó una parte importante de la caída por lo que ocurre en la industria automotriz. "En mayo de 2015, la fabricación de vehículos automotores presenta caídas de 0,7% con respecto a abril pasado y de 9% con respecto a mayo de 2014. En el acumulado de enero a mayo de 2015 la producción automotriz muestra una disminución de 15,8% en comparación con igual período del año anterior", informó el organismo oficial.
En la vereda de enfrente está el sector de la construcción, que en los primeros cinco meses del año registró una suba de 8,9%.
Estudios de consultoras privadas arrojan una caída aun mayor de la industria. Además de la caída de 3% en comparación con mayo del año pasado estimada por FIEL, la firma Ledesma afirmó que "el nivel de producción industrial correspondiente a mayo de 2014 se ubicó 3,3% por debajo del de 2014".. (La Nación)