Si se confirma, astronautas del futuro podrían utilizarla para vivir.
De acuerdo condatos enviados por el robot Curiosity, cada noche se juntaría agua líquida en el suelo marciano, que luego se evaporaría durante el día. Si misiones futuras confirman este ciclo hídrico, algún día astronautas podrían "cosechar" humedad para disponer de agua en el planeta rojo.
Ya existían evidencias de que hay agua helada en los polos marcianos y vapor de agua en su atmósfera. Sin embargo, hasta ahora no se había detectado agua líquida, porque la temperatura y la presión atmosférica en la superficie del planeta son muy bajas. Sin embargo, también se sabía que el suelo marciano contiene sales, lo que indica que las condiciones de la superficie helada no son una barrera absoluta a la existencia de agua líquida.
De modo que Javier Martin-Torres, de la Universidad Tecnológica Luleå de Kiruna, Suecia, y sus colegas les siguieron las huellas a las condiciones meteorológicas marcianas durante el primer año del Curiosity.
Registrando la humedad y las temperaturas del aire y la tierra con su estación de monitoreo ambiental (REMS, según sus siglas en inglés), el equipo encontró que posiblemente durante e las noches frías pero húmedas del invierno marciano el agua se mantenga estable en los primeros cinco centímetros de la superficie.
También podría haber períodos cortos de estabilidad en otras estaciones.
Ellos sugieren que el perclorato de calcio que está en el suelo absorbe agua de la atmósfera hasta que se disuelve en una solución salina. Cuando el sol asciende y la temperatura se hace más elevada, el agua se evapora y vuelve a la atmósfera iniciando un nuevo ciclo.
El robot Curiosity no puede medir el agua directamente, dice Martin-Torres, pero todas las piezas del rompecabezas sugieren que debería estar allí.
"Están dadas las condiciones para la bruma atmosférica, pero si queremos medirla directamente necesitamos otro tipo de equipamiento", afirma. Por ejemplo, un dispositivo que pueda buscar cambios en la conductividad eléctrica.
Alfonso Dávila, del Instituto SETI de Mountain View, California, considera que no hay suficiente evidencia como para estar absolutamente seguros de que hay agua líquida en la superficie de Marte, pero que estos resultados indican que el planeta tuvo agua en algún momento de su historia.
De todos modos, si el agua efectivamente está allí, es improbable que albergue vida. La temperatura promedio de -70° es demasiado baja para que se reproduzca o funcione el metabolismo de un organismo terráqueo.