Sarah Pinkerton Smith soprendió a todos cuando remarcó que su mascota era maltratada por otros animales. "Siempre pensé que él era un perrito guapo pero fue muy fastidiado durante años. Era hora de hacer algo. Por suerte, Hollywood tenía una solución", comentó. 


La mujer aseguró que no dará información sobre el médico que operó a su mascota, que se llama Snooky, para no afectar su reputación. 

No obstante, Smith se mostró conforme con los resultados de la cirugía, que incluyó "levantamiento de cuello y ojos, y un ajuste de orejas". 

"Firmé un contrato de confidencialidad con el doctor que trabajó en Snooky. Él no quiere ser mencionado porque no desea llamar la atención pero, como pueden ver por su trabajo, es lo mejor de lo mejor", explicó. 

Smith, que también se sometió a cirugías plásticas, argumenta que el perro está mucho más feliz ahora con su nuevo rostro. "No puede dejar de pasar por un espejo sin ver su reflejo. Igual que yo", manifestó.