Los bajos precios del cereal y sin noticias alcistas de peso, atentan contra las intenciones de siembra de los productores del país del norte. Ante falta de incentivos, los analistas vaticinan que se reducirá la implantación maíz por los bajos precios.
Como consecuencia de las pobres cotizaciones se desalienta el uso de  fertilizantes porque a estos valores  bajos los números no cierran para afrontar inversiones de alta tecnología en los cultivos, estimándose una caída de rendimientos en la presente campaña.
La relación de intercambio entre la soja  y el maíz hacen al farmer inclinarse por la oleaginosa en la elección de los cultivos a sembrar, los analistas estiman que se reducirán las hectáreas de maíz y se incrementarán las de soja en el informe de finales de marzo.
Tenemos que analizar cómo impacta la caída del precio del petróleo que  reduce las intenciones de uso para generar biocombustibles y disminuyen la cantidad demandada, en contrapunto que los bajos precios provocan una caída en  los costos de implantación que en parte ayudan a mantener sin grandes cambios la oferta.
El incremento del dólar con respecto a otras monedas tampoco ayuda a las exportaciones de los productos del agro.
Todo parece indicar que estos precios llegaron para quedarse y entramos en una especie de espiral descendente de precios difícil de salir, salvo complicaciones climáticas que perjudiquen la producción en el hemisferio norte.
En Argentina los productores esperan que el próximo Gobierno elimine aunque sea en parte las retenciones y se devalúe el dólar para favorecer las exportaciones. Este optimismo en medidas favorables para el agro, sumado a la caída de los precios retrasaron las ventas Forward y el porcentaje vendido de granos es bajo. Sin dudas el hombre de campo venderá para cancelar sus compromisos financieros y luego esperará cambios positivos en los precios para comercializar el resto de la producción. La reducción provocada en la oferta de estos bienes no es un tema menor en el contexto mundial, Argentina es un operador de peso en el mercado internacional, que se demoren las ventas le otorgan sustento a las cotizaciones.
Ante tantas noticias bajistas y con la necesidad de “intencionar” las siembras de maíz en Estados Unidos deberán aparecer en los próximos días noticias que sean capaces de teñir  de verde las pantallas de las cotizaciones, el informe puede ser una, y es probable que tengamos una leve recuperación en los precios del cereal en el contexto internacional, útil para aquellos productores que tienen escaso nivel de cobertura en materia  de precios.
 
Juan Vasquetto