Daniel Alberto López, el maquinista del tren chapa 1 que chocó a la formación detenida, "no recibió aún el alta médica, por lo que se decidió pasar la indagatoria para mañana (por hoy) al mediodía, al igual que la del conductor Eduardo Ahumada, cuya formación recibió el impacto", precisaron fuentes de la defensa de los detenidos.

Tanto Ahumada como López están acusados de estrago doloso seguido de muerte y ambos "siguen incomunicados", mientras los guardas que viajaban en cada una de las formaciones declararon el viernes como testigos y aseguraron que no notaron nada raro antes del accidente, informaron fuentes judiciales.

Precisaron, además, que no estaban en las cabinas de conducción al momento del impacto, al tiempo que fuentes del juzgado indicaron que se esperaban los resultados de las pericias en cada tren siniestrado.

Por su parte, el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, recibió a académicos y técnicos que formarán parte de una comisión investigadora para que "se esclarezcan los hechos y se determinen responsabilidades", subrayó.

Entre otros forman parte de esa comisión los ingenieros José Antonio Di Siervi, de la Universidad Tecnológica Nacional, Carlos Alfredo Godfrid, de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Buenos Aires y José Antonio Barbero, de la Universidad Nacional de General San Martín.

Los profesionales iniciaron las tareas de investigación y en la tarde del viernes fueron al lugar donde ocurrió el accidente, en el cruce de la calle Zapiola y las vías del ferrocarril Sarmiento, antes del ingreso a la estación Castelar, para realizar tareas de campo.

La colisión de trenes se registró ayer alrededor de las 7, en la localidad de Castelar, cuando un tren que iba de Once a Moreno chocó a otro que estaba detenido en las vías, en el mismo sentido de circulación y también llevaba pasajeros.

Como consecuencia del accidente murieron dos hombres y una mujer y otras 315 personas sufrieron heridas.

El servicio, que había sido suspendido tras el accidente, se reanudará hoy una vez que los técnicos y peritos terminen de trabajar sobre las formaciones siniestradas.