A partir de un rinde promedio nacional de 29 qq/ha, se estima la producción de soja en 58 millones de toneladas. Los problemas por excesos hídricos son considerables y afectaron nuevamente sectores que el año pasado mostraron inconvenientes. También hubo problemas en las siembras, dejando de lado 240 mil ha. Todo ello deja la superficie sembrada con soja en 20,4 millones de ha.
Es destacable el estado de los cultivos de Santa Fe, Córdoba y el norte bonaerense con rindes que podrían alcanzar o superar los máximos históricos. Santa Fe podría obtener un rinde récord de 35,6 qq/ha. Si el clima y los factores bióticos no se interponen en las próximas semanas la producción de la oleaginosa se encamina a alcanzar el mayor nivel productivo.
SOJA 2014/2015
Región Pampeana
En enero y en los primeros 10 días de febrero, las lluvias acompañaron de forma inusual elcrecimiento de la oleaginosa.
El ciclo actual se está caracterizando por no haber aparecido los típicos períodos de estrés termo-hídrico que normalmente se asocian al verano. Incluso los últimos frentes se destacaron en el oeste de la región y siguen alentando las buenas condiciones de los cultivos en Córdoba.
Este favorable contraste con la campaña previa donde la falta de agua y los golpes de calor extremo acompañaron al cultivo hasta principios de febrero mantienen al cultivo creciendo prácticamente sin limitantes.
Los problemas en la región no tienen que ver con la faltante de agua sino con los elevados costos que condicionan la obtención de altos niveles productivos.
En estas últimas semanas la presión de plagas se ha normalizado y los niveles de bolillera y medidora principalmente están lejos de los que se observaban en el ciclo anterior. Mancha marrón, mancha púrpura y hasta amenazas de roya son seguidos de cerca como potenciales agentes reductores y se realizan los controles preventivos.
El centro de alta presión del Atlántico despejaría de lluvias el margen oriental en las próximas dos semanas.
Se recuerda que el este de la región, sobre todo en las regiones mesopotámicas, recibióconsiderables volúmenes de agua y el comportamiento que se espera sería otro factor que colaboraría para que en las próximas semanas no se profundicen los problemas asociados a losexcesos hídricos.
En buena parte de la provincia de Córdoba, Santa Fe y el norte bonaerense los lotes de soja se encuentran en muy buenas condiciones, prevaleciendo un crecimiento excelente como hace años que no ocurre.
Los primeros lotes sembrados están alcanzando el máximo tamaño de semilla con bajos niveles de plagas, mientras el resto transita el período crítico sin mayores inconvenientes. Las sojas de segunda también se están desarrollando en muy buenas condiciones y contribuyen favorablemente a las expectativas de la región.
La situación cambia en el centro oeste de Buenos Aires en la franja que limita con La Pampa y se une con la Cuenca del Salado y en el área que desciende al sureste provincial. En el centro oeste la situación es complicada, hay un deterioro de las condiciones de los cultivos que está siendo apaciguada por el efecto de napas pero las lluvias que se esperaban en estos últimos días tuvieron un comportamiento errático y muchas zonas no fueron alcanzadas.
En la gran cuenca triguera, la que domina la localidad de Tres Arroyos, hay una situación muy heterogénea pero que ya proyecta severos recortes de los rindes potenciales.
Las lluvias dejaron buenos acumulados hacia la zona de Dorrego pero hacia Chávez y Tres Arroyos la situación es delicada. Se observaban muchos manchones en los lotes de soja de primera y en los lotes de segunda la pérdida de plantas es notoria.
NOA y NEA
En Salta la situación hídrica se reacomodó en las últimas dos semanas. A pesar de los problemas de siembra que ocasionaron demoras en las labores de implantación y la imposibilidad de concretar las siembras en lotes puntuales, si las lluvias acompañan se espera que la provincia pueda alcanzar niveles normales de producción.
Este año hubo un problema muy fuerte de malezas resistentes. Entre las plagas se destaca la presencia del picudo que requiere hasta seis o siete aplicaciones para su control y han cambiado muchísimo la estructura de costos y las condiciones de arrendamiento en la zona.
Santiago del Estero ha tenido muchos problemas asociados a los excesos de agua en la franja este de la provincia. Hay muchos lotes que no han podido ser sembrados y otros que han perdido sectores por los altos montos de agua recibido.
En Chaco también quedaron lotes sin sembrar pero más asociados a temas económicos -falta de acuerdos en arrendamientos y altos costos de controles de malezas resistentes. Hubo también muchos problemas de implantación y en muchos casos problemas asociados a la baja energía germinativa que muestran numerosos lotes con baja densidad de plantas.
Esto puede ser otro condicionante del potencial de rinde. Son pocos los cuadros que están entrando en etapas reproductivas y, en general, no se esperan buenos rindes. Esto es motivo de preocupación por los altos costos de indiferencia que muestra el cultivo en este ciclo.
A diferencia del informe de enero en el que se trabajó con proyecciones en base a comportamientos históricos, ya es posible efectuar una estimación de rendimientos.
Las condiciones bajo las cuales empezaron a definirse los rindes permiten estimar el rindepromedio en 29 quintales por hectárea a escala nacional. Sobre la base de una superficie no cosechable de 440.000 hectáreas, la producción de soja que podría obtenerse en la nueva temporada sería de 58 millones de toneladas.
En el siguiente cuadro se muestran los datos estimados para cada provincia recordando que los datos de Entre Ríos son tomados del SIBER de la bolsa de cereales de Entre Ríos.(BCRA)