El encuentro se jugó en el estadio Monumental y sobre el final fue expulsado Leandro Romagnoli, de San Lorenzo, por una fuerte infracción a Leonel Vangioni.

La revancha se jugará el próximo miércoles 11, en el Nuevo Gasómetro, desde las 21. No contará el gol de visitante como doble y en caso de igualdad de puntos y gol al término de los 180 minutos reglamentarios, el ganador se definirá con tiros desde el punto penal.

El triunfo significó también un alivio para River, que venia de dos traspiés ante Boca, el último por goleada, y un acierto para el entrenador Marcelo Gallardo, que le ratificó la confianza a los mismos futbolistas que perdieron los clásicos en Mar del Plata y Mendoza.

Y el primer tiempo le dio la razón al técnico, ya que la superioridad del "millonario" fue absoluta ante un San Lorenzo que mostró falta de rodaje y que sintió la ausencia de su distribuidor de juego en la mitad de la cancha: el lesionado Néstor Ortigoza.

En esa etapa River tuvo siete chances claras para convertir y no lo pudo cristalizar en la red. El colombiano Teo Gutiérrez, el arquero Sebastián Torrico y los palos fueron los protagonistas de esos 45 minutos.

El delantero porque dispuso de tres oportunidades netas, el arquero porque salvó dos cabezazos a "quemarropa" de Teo y los postes porque ahogaron tres veces el grito de gol de los simpatizantes de la banda roja (dos a Gutiérrez y una a Jonathan Maidana).

El segundo tiempo fue más parejo, siempre con predominio de River, pero en este caso San Lorenzo contó con un par de chances en los pies del uruguayo Martín Cauteruccio, ambas resueltas con solvencia por Marcelo Barovero.

Y cuando el partido se encaminaba al cero a cero, con River agotado por la presión que ejerció en el primer tiempo y San Lorenzo conforme con la igualdad, llegó el tanto de Sánchez tras una mala salida de Juan Mercier y un buen pase del ex Huracán Gonzalo Martínez.

Sobre el final, un "planchazo" de Romagnoli a Vangioni derivó en la reacción del defensor riverplatense y en la expulsión del enganche de San Lorenzo.

La Recopa Sudamericana enfrenta todos los años al ganador de la Copa Sudamericana (River Plate) y al campeón de la Copa Libertadores (San Lorenzo). Esta Copa se creó en 1989 y tendrá indefectiblemente un cuarto campeón argentino, que se sumará a Boca Juniors, el más ganador con cuatro títulos (1990, 2005, 2006 y 2008); Independiente (1995) y Vélez Sársfield (1997).

Es la cuarta ocasión que la protagonizan dos equipos del fútbol argentino, tal como ocurrió en 1995 cuando el "Rojo" le ganó a Vélez en Japón; en 1997 con triunfo del "Fortín" sobre River también en Japón y en 2008, año en el que Boca doblegó a Arsenal, a partido y revancha en "La Bombonera" y el "Cilindro" de Avellaneda.

River fracasó dos veces en su intento de atrapar la Recopa. La primera, ante Vélez en 1997, y la segunda, al año siguiente frente a Cruzeiro, que le ganó en Belo Horizonte (2-0) y Buenos Aires (3-0).

San Lorenzo, por su parte, también tuvo un fallido en 2003, cuando perdió con Olímpia de Paraguay 2-0 en el Coliseo Memorial de Los Angeles, Estados Unidos.