El presidente de Uruguay, José Mujica, se refirió hoy al papa Francisco , con quien se entrevistó hace unos días en el Vaticano en el marco de una gira internacional, como "un papa canchero que tiene mucho boliche y una gran tarea por delante".
 
En una entrevista exclusiva concedida al diario uruguayo "La República", Mujica agregó que "Si Dios existe, le tiene que dar una mano (al papa) porque tiene la misión de reformar la única corte antigua que queda sobre la tierra".
 
"Es un Papa sobrio, que tiene conciencia de que no es época de una iglesia ampulosa sino una que esté cerca de los pobres", remató el presidente uruguayo, un exguerrillero tupamaro de 77 años, famoso por su falta de apego a las formas y porque vive en una chacra (granja) en las afueras de Montevideo.
 
Gira presidencial
 
Mujica, que tiene un patrimonio de 212.000 dólares (160.000 euros) y dona casi el 90 % de su sueldo, de unos 12.000 dólares mensuales (9.000 euros), a su partido y a la construcción de viviendas sociales, también se refirió en la entrevista a otros aspectos de la gira.
 
"Lo más valioso fue el interés chino en las grandes obras", afirmó sobre el gigante asiático, su primera escala de un viaje de dos semanas que tuvo como objetivo de atraer inversiones al país sudamericano.
 
Respecto a su siguiente escala, España, explicó que reiteró al rey Juan Carlos, al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que "tengan una buena disposición a la ronda de negociaciones entre la Unión Europea y el Mercosur" para lograr un acuerdo de libre comercio y "demuestren una actitud abierta y próspera" en el proceso.
 
"De lo contrario seguiremos negociando con Asia y eso no les conviene a ellos y tampoco a nosotros, porque no es bueno tener todos los huevos en una sola canasta", subrayó.
 
Por último, consultado sobre el interés que generó su figura en algunos medios de comunicación españoles opinó: "Lo que pasa es que les llamo la atención porque en el mundo hay escasez de cosas raras".

Francisco recibirá al presidente venezolano
 
El papa Francisco recibirá el lunes en audiencia privada en el Vaticano al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y se espera que tenga otro encuentro con el líder de la oposición, Henrique Capriles.
 
La de Maduro y Francisco "será una audiencia a un jefe de Estado como todas las que el Papa ha concedido en los últimos meses a mandatarios latinoamericanos", explicó ayer el vocero del Vaticano, Federico Lombardi, al confirmar el encuentro.
 
El Papa recibirá al presidente venezolano en su biblioteca privada en el tercer piso del palacio apostólico, tal como prevé el protocolo. Su predecesor, Hugo Chávez, fue recibido en dos ocasiones por Juan Pablo II y una por Benedicto XVI.
 
La Iglesia Católica venezolana, que en el pasado mantuvo tensas relaciones con el gobierno socialista de Chávez, se ofreció como mediadora entre el gobierno y la oposición después de que el papa Francisco llamara al diálogo para superar la crisis política desatada por las elecciones de abril.
 
De acuerdo con el periodista independiente Nelson Bocaranda, que filtró en su momento la información sobre la enfermedad de Hugo Chávez, Maduro se decidió a pedir una audiencia luego de conocer que Capriles ya había solicitado una.
 
"Al conocer Maduro que el papa Francisco recibiría a Capriles se apresuró a solicitar audiencia privada para ganarle una. Será el 17", tuiteó el periodista.
 
Todavía se desconoce la fecha del encuentro entre el Sumo Pontífice y Capriles.