Moreno se reunió con operadores y cambistas, y les exigió que "lo ayuden a dar un empujoncito extra" al retroceso de la divisa paralela.
La cotización del dólar paralelo se mantuvo "congelada" ayer a $ 8,57 para la venta, en un mercado prácticamente inactivo ante la fuerte presión que ejerció el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, para evitar cualquier rebote.
La campaña de persuasión oficial sobre operadores y cambistas con diálogo con el Gobierno (que incluyó renovadas amenazas) se puso en marcha, en realidad, en la tarde de anteayer, cuando los portales de noticias reflejaban que esa divisa para la venta en operaciones en negro se estaba negociando a $ 8,80, con un repunte de 30 centavos respecto del cierre previo.
Pero la acción se repitió ayer, para no dejar dudas, pero con una modificación: no fueron llamados, sino reuniones con cambistas para explicarles el plan oficial y delinear lo que debería ocurrir de aquí hasta la puesta en marcha efectiva del blanqueo de capitales. Para ese momento, quiere el paralelo debajo de 8 pesos.
Con el rebote de la antevíspera, el billete estaba borrando en horas buena parte de la baja de 40 centavos que acumulaba en la semana, lo que habría enfurecido al funcionario. "Llamó «sacado» como en sus mejores días. Demandaba que hagamos lo que sea para voltearlo de 8 pesos y dijo que si no colaborábamos nos iría muy mal", reconocieron en una de las tantas agencias de cambio y bancos en que recibieron el "convite".
Tras haber "ninguneado" esta variable durante largos meses, ahora mantener el precio del paralelo bajo control se transformó en una especie de obsesión oficial. Entienden que mantenerlo con una cotización estable o con clara tendencia bajista es fundamental para mejorar las chances de éxito del plan de blanqueo de divisas que, se estima, estará operativo en tres semanas.
Luego, según creen en el Gobierno, ya no sería necesario tanto esfuerzo o tanta presión. "La irrupción del Cedin hará el resto", dicen convencidos en el Ministerio de Economía en referencia al certificado que servirá para destinar a inversiones inmobiliarias los dólares que se declaren e ingresen en el país.
Después de todo, para eso la reglamentación buscará asegurar que este documento circule como un cuasidólar (tendrá endosos indefinidos y podrá comprarse en pesos en el mercado secundario a un tipo de cambio que se imagina cercano al "contado con liquidación"). "Intentarán que sea lo que fue el patacón al peso en su momento", explicó un operador inmobiliario que participó de algunas de las reuniones que distintos funcionarios mantuvieron con representantes de ese sector en los últimos días.
"El Gobierno parece confiar en que el Cedin tire abajo al dólar blue y le permita poner coto a la pérdida de reservas; erigiéndose en un sucedáneo del dólar billete que atraiga la demanda por moneda extranjera a un precio cercano al blue y alternativo a las opciones disponibles. Así, finalmente consolidaría un "desdoblamiento de facto" con varios tipos de cambio diferentes al oficial", comentó en un informe la consultora Empiria al evaluar la jugada oficial.
ALIVIO POR LAS COMPRAS
Por lo pronto, ayer la sostenida presión oficial derivó en lo que los operadores describieron como un "virtual feriado". "Hoy no atendí a nadie por las dudas. Sólo recibimos algunos pedidos de hoteles que nos derivan a turistas porque a ellos no podemos dejarlos en banda", explicó un operador. "Entre los llamados y la psicosis que se generó otra vez, la mayoría optó por no operar", confirmó otro.
En la plaza oficial, en tanto, el Banco Central (BCRA) aprovechó el aumento en las liquidaciones de los exportadores para realizar la mayor compra de divisas en lo que va del año (habrían sido unos US$ 170 millones) y mantener el precio del billete en el segmento mayorista prácticamente sin cambios, a $ 5,2975/5,30 por dólar, para la compra y venta, respectivamente.
Semejante compra le permitiría cerrar una de las pocas semanas del año sin pérdida neta de reservas, dato que adquiere importancia toda vez que en lo que va de 2013 ya resignó más de US$ 4700 millones.
En el mercado se estima que la entidad monetaria acumuló en la semana un saldo positivo de US$ 250 millones por sus intervenciones en la plaza cambiaria que le permitió más que compensar pérdidas por pagos de deuda o por la incesante salida de depósitos privados en dólares de los bancos.
PARAGUAYOS FUGAN DÓLARES A LA ARGENTINA
El presidente de Paraguay, Federico Franco, denunció ayer una gran "fuga" de dólares de ese país con destino a la Argentina para cambiarlos aquí por pesos en el mercado negro y obtener beneficios al hacer compras. Su gobierno estima que ese perjuicio llegó a los US$ 200 millones en mayo y dijo que les es "muy difícil controlar el guaraní cuando en la Argentina hay dos valores para el dólar".