La exportación de sorgo forrajero a China quedó oficialmente abierta desde el lunes, tras el acuerdo firmado por el ministro de Agricultura, Carlos Casamiquela, con su par de la Administración General de Supervisión de Calidad, Inspección y Cuarentena de ese país, Zhi Shuping.
Según se informó oficialmente, lo mismo sucederá con la venta de girasol confitero al país asiático, en tanto que los ministros informaron que quedó operativo el Protocolo Fitosanitario para la Exportación de Peras y Manzanas de Argentina a China firmado en julio de 2014 en Buenos Aires.
La firma del protocolo de entendimiento entre ambos países se realizó en el marco de la reunión que Casamiquela mantuvo con Shuping, acompañado por su jefe de Gabinete, Héctor Espina; el secretario de Coordinación Político-Institucional y Emergencia Agropecuaria, Javier Rodríguez; y la presidenta del SENASA, Diana Guillén.
"La relación en materia agroalimentaria y agroindustrial entre Argentina y China se sigue consolidando, lo cual se refleja en acuerdos concretos que implican un fortalecimiento de los vínculos entre ambos países", afirmó Casamiquela.
Destacó que "la firma de este Protocolo es evidencia de ello y, en esta línea, es que estamos trabajando a fin de impulsar las negociaciones de acceso a los mercados".
Por su lado, Rodríguez explicó que la apertura del mercado chino para el sorgo argentino "constituye un avance sustancial para la diversificación de exportaciones" y destacó "la importancia de ampliar la oferta exportadora nacional incluyendo productos con un elevado potencial".
El ministro Zhi Shuping manifestó que "la cooperación en materia de inspección y cuarentena jugó un papel fundamental en el avance de la agenda bilateral".
Remarcó la importancia de la reciente visita del Presidente Xi Jinping a la Argentina para agilizar las negociaciones de acceso de nuevos productos argentinos al mercado chino y destacó que la firma del nuevo protocolo de sorgo refleja la eficacia de la cooperación entre los dos países.
Hasta 2012, las importaciones chinas de sorgo no superaban las 100.000 toneladas por año, que estaban esencialmente destinadas a la producción de aguardiente.
La necesidad china de aprovisionarse de granos forrajeros para acompañar la demanda del sector productor de aves y cerdos, llevó a que en 2013 las importaciones de sorgo crecieran a un millón de toneladas por un valor de 369 millones de dólares y a que en los primeros siete meses de 2014 ya superaran los 2,4 millones de toneladas por 689 millones de dólares.
El ingreso con fuerza de China como comprador está teniendo un fuerte impacto en el mercado mundial, que es dominado por Argentina, Australia y Estados Unidos.
Argentina, en su calidad de segundo exportador mundial, aspira a captar parte de esta potencial demanda y a convertirse en un proveedor confiable de un producto de calidad.
En la campaña 2013/2014, la producción nacional alcanzó las 3,47 millones de toneladas y se estima que en 2014 las exportaciones de este grano llegarán a 1,47 millones de toneladas.
El ministro chino anunció que Argentina ya se encuentra habilitada para comenzar a exportar girasol confitero a ese país, tras haberse concluido el análisis de riesgo correspondiente.
De esta manera, grandes empresas procesadoras chinas de girasol para consumo humano que manifestaron fuerte interés por la producción argentina, podrán comenzar a abastecerse desde Argentina para cubrir en contraestación su demanda insatisfecha.
También se informó que ya quedó operativo el Protocolo Fitosanitario para la Exportación de Peras y Manzanas de Argentina a China firmado en julio de 2014 en Buenos Aires, tras la visita de inspección realizada por técnicos de AQSIQ a Buenos Aires en la primera semana de noviembre para evaluar sus condiciones de implementación.
Además, el funcionario chino informó que desde el viernes, cuatro nuevas plantas frigoríficas argentinas quedaron habilitadas para exportar carne vacuna deshuesada a China, elevando a 23 el número de establecimientos registrados para la comercialización.
Las importaciones chinas de carne vacuna desde Argentina siguen creciendo, habiendo alcanzado en los ocho primeros meses del año las casi 10.000 toneladas por un valor de 48 millones de dólares.(AMBITOFINANCIERO)