Avanzó a los cuartos de final al vencer en la definición por penales al Deportivo Capiatá, por 4 a 3, tras ganar en el tiempo reglamentario por 1 a 0.
El equipo xeneize enfrentará en la próxima serie a Cerro Porteño, que eliminó al campeón vigente Lanús, primero en Asunción y luego en Buenos Aires en las próximas dos semanas.
Jonathan Calleri marcó el gol de Boca a los 28 minutos del segundo tiempo, etapa en la que fue expulsado el volante de Capiatá Gustavo Velázquez, a los 19 minutos.
En la serie de penales convirtieron para Boca Emanuel Gigliotti Fernando Gago, Andrés Chávez y Agustín Orión, y el arquero Antonio Franco le contuvo a Claudio Pérez y a Nicolás Colazo.
Para Deportivo Capiatá marcaron Fabio Escobar, Néstor González y Angel Martínez, Orión detuvo los envíos de Julio Irrazabal y Arturo Aquino, y Blas Irala elevó su remate sobre el travesaño.
El encuentro se jugó en el estadio Feliciano Cáceres de Sportivo Luqueño, en el cual fue local Capiatá, y el árbitro fue el colombiano Wilmar Roldán.
El esquema ofensivo que planteó el técnico xeneize, Rodolfo Arruabarrena, con un 3-4-3 demasiado rígido le dio al equipo argentino dominio territorial en el primer tiempo pero eso no se tradujo en llegadas en profundidad porque conceptualmente sus jugadores equivocaron el camino y abusaron de pelotazos aéreos que facilitaron los despejes del modesto equipo paraguayo, fundado hace apenas seis años.
Pero de cualquier manera tuvo dos claras chances para convertir con un remate de César Meli en el palo y un cabezazo desviado de Federico Carrizo, solo frente a Franco. Y como contrapartida sólo sufrió en una escapada de Escobar, cuyo zurdazo cruzado se fue desviado.
En el segundo tiempo no varió el panorama hasta que la expulsión de Velázquez terminó por inclinar la cancha hacia la valla de Franco, que comenzó a ser tan figura como lo fue la semana pasada en La Bombonera en la impensada victoria de los paraguayos.
La presión fue ostensible, se jugó muy cerca de Franco y así fue como en una jugada en la que Chávez no pudo dominar un centro la pelota le quedó a Calleri, quien convirtió con remate alto.
Y si Boca no ganó en los 90 minutos fue porque no tuvo esa paciencia tan necesaria para encontrar los claros, ante una defensa férrea como la de Capiatá.
Gago jugó mal todo el partido y Luciano Acosta, cuando ingresó en el segundo tiempo, pecó de obstinado en la individual y perdió la pelota en cada uno de sus intentos.
Así se llegó a la serie de penales, una vieja amiga del máximo ganador de títulos internacionales junto con el Milan, y la clasificación viajó para La Bombonera, aunque el rendimiento no fue bueno y deja dudas en cuanto a su futuro en esta Copa Sudamericana.
Boca eliminó en la ronda anterior a Rosario Central, en tanto que Capiatá llegó a esta instancia tras eliminar a Danubio de Montevideo y a Caracas de Venezuela. Y como consuelo quedar a un paso del sueño de dejar en el camino al multicampeón argentino, que ya ganó la Sudamericana en 2004 y 2005.