La Assal reconoció "la aparición de casos de carbunco en animales y personas ocurridos en el territorio santafesino". Se trata de "una enfermedad contagiosa frecuente y mortífera en el ganado lanar, vacuno, cabrío y a veces en el caballar".
"El cuadro comienza con una violenta gastroenteritis, vómitos y deposiciones hemorrágicas", alertó ayer el ministro de Salud santafesino, Mario Drisun, quien aconsejó evitar la ingesta de alimentos que no provengan de establecimientos certificados y seguros.
De acuerdo a lo consignado por la autoridad sanitaria, se registraron alertas "sobre prácticas llevadas a cabo por personas que se dedican a la compra de animales enfermos, moribundos y muertos por distintas enfermedades para su posterior comercialización", siendo las ventas más comunes las de carne picada, chorizos y milanesas.
Además del carbunco, "existen otras enfermedades transmisibles de los animales al hombre como brucelosis y tuberculosis, algunas de ellas mortales, las que son difundidas a través de estas prácticas que atentan contra la salud pública y ponen en riesgo a la población".
El ministro Drisun señaló que "por suerte" el riesgo "está limitado solo a algunos lugares del norte de la provincia donde se han preparado alimentos fuera de los controles de los sistemas de sanidad animal".
En un trabajo conjunto con la Assal, el Ministerio Público de la Acusación desde 2013 libró órdenes de allanamiento en las localidades de Sastre, Gálvez, San Carlos Centro y San Jerónimo Norte, donde hallaron "elementos relacionados al tema que fueron puestos a disposición de la justicia para su evaluación".