El ministro Eleuterio Fernández Huidobro reconoció que "es un problema" la llegada de fondos desde el exterior; aclaró que la mayoría no llega desde Argentina.
El ministro de Defensa de Uruguay, Eleuterio Fernández Huidorbo, reconoció hoy que su país está "inundado de dólares" y que el principal problema es activar medidas de política económica que permitan "parar" ese fenómeno, debido al impacto de la llegada de inversiones, algunas "especulativas".
El funcionario, un dirigente con pasado guerrillero como el presidente José Mujica, contó en una entrevista con el periodista Jorge Lanata, reconoció que el territorio uruguayo no cuenta con una cobertura completa de radares, pero negó que sea un "paraíso del lavado" de dinero.
De todos modos, el ministro resaltó que "Uruguay está inundada de dólares" y destacó que uno de los principales "problemas" que tiene la administración local es "cómo paramos la llegada de dólares, porque no baja la cotización y los exportadores pierden competitividad. Estamos perdiendo a pasos agigantados".
Fernández Huidobro aclaró que la llegada de esos fondos "no" son en forma exclusiva de la Argentina, donde se registran fuertes desequilibrios y se aplican controles en el mercado de cambios, sino "de Europa y de Estados Unidos, donde hay tasas a cero. Eso nos perjudica, sobre todo los que vienen por poco tiempo, por razones especulativas".
La negar que su país pueda albergar fondos de origen desconocido, Fernández Huidobro aclaró que el gobierno de José Mujica "ha cumplido las normas de la OCDE. Estábamos en lista negra, pasamos a la lista gris y ahora estamos en blanco. Yo no le doy mucha 'pelota' a eso, porque de hecho los países como Estados Unidos y Europa son los más grandes paraísos fiscales".
El recuerdo de su pasado
El ministro de Defensa, de todos modos, al desmentir que en su país se registrase un fenómeno masivo de lavado de dinero, recordó su pasado como combatiente guerrillero. "En mi pasado asalté muchos bancos. Uno de ellos lo asalté para llevarme la contabilidad en negro. Fue enn el Banco de Crédito, en el año 1968; era un señor banco".
"Lo hicimos para denunciar lavado de dinero y fuga de capitales a Brasil. En sus balances figuraban los más grandes prohombres de mi patria. Le entregamos los libros a la Justicia, le tuvimos que avisar a la Policía que habíamos robado porque el Banco se calló la boca. Fue como un cuento... Los asaltantes llamaron al Servicio de Inteligencia y le dijimos buenas tardes, hablan los asaltantes, nosotros acabamos de asaltar un banco y queremos que se entere la población".
Finalmente, recordó que "esa misma noche hubo un incendio. Fue un hecho muy famoso que ocurrió hace medio siglo. En esos libros figuraban dos avionetas de propiedad del banco y una estancia. Esos bienes se utilizaban para transportar dinero, le hablo de hace medio siglo".