En su último post del 5 de abril, Santiesteban denuncia que intentaron llevarlo al hospital militar Salvador Allende "contra su voluntad", para que no tuviera acceso a la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), que prepara un informe sobre la situación carcelaria para entregarlo al Consejo de Derechos Humanos de la ONU de visita en la Isla el 1 de mayo.
 
"Ante su tajante negativa (de ir al hospital), en el día de hoy (10 de abril) le iban a dar un pase de unas horas para que fuera a la casa. Y amaneció esperando dicho conducto. Pero en lugar de ello, se encontró con que lo fueron a buscar, lo esposaron y se lo llevaron no se sabe a dónde. Desde la mañana esperamos noticias infructuosamente", comentó en su blog.

"Hemos pedido el acceso en varias ocasiones", confirmó a la agencia DPA desde México el jefe de la delegación regional del Comité Internacional de la Cruz Roja, Karl Mattli. Se trata de un pedido "de carácter permanente", agregó.
 
La organización no ha tenido acceso a las prisiones cubanas desde los años 90. Un vocero de AI confirmó este miércoles que la organización con sede en Londres estuvo en Cuba por última vez en 1988 y que no ha recibido respuesta a sus solicitudes para visitar la isla desde entonces.
 
El interés de las organizaciones humanitarias se centra en los presos políticos, cuya existencia no es reconocida por el gobierno de Raúl Castro, que acusa a los disidentes de ser mercenarios financiados desde el extranjero para desestabilizar el país.
 
Cuba tiene una población de unos 57.000 reclusos, según cifras difundidas en mayo del año pasado por primera vez en décadas por el gobierno cubano. La CCDHRN cifra el número sin embargo entre 60.000 y 70.000.
 
Varios de los medios extranjeros acreditados en la isla pudieron entrar el martes a cuatro cárceles en La Habana, entre ellas el Combinado del Este, una de las cinco de mayor seguridad en Cuba, así como una prisión de mujeres en la localidad de El Guatao.