Son amigos del colegio y un ejemplo palpable de aquella frase que dice que los amigos están en las buenas y en las malas. Un grupo de 12 compañeros del Instituto Secundario El Salvador decidieron raparse para acompañar a su amigo, Lucas Casor, quien está peleando contra el cáncer. 

"Fue muy emotivo el gesto que ellos hicieron por mí. Me largué a llorar. Nunca pensé que lo iban a hacer", contó Lucas a La Nación. 

A cuatro días de conocer el diagnóstico, Lucas ingresó al quirófano para que le extirparan un tumor. Tras analizar una biopsia, una junta médica resolvió que hiciera quimioterapia por dos meses. 

Por su estado físico, Lucas dejó el colegio, pero no perdió contacto con sus amigos. El lunes pasado, los chicos lo sacaron de los grupos de WhatsApp que compartían y a la noche volvieron a agregarlo. Ahí llegó la sorpresa. Las fotos mostraban a todos sus amigos rapados. La emoción de Lucas fue enorme.

Su mamá Celina también se sintió conmovida por el gesto de amor de los chicos. "A veces uno dice porqué nos tocó, pero saber que hay un Dios grande que en este momento difícil puede transmitir cosas preciosas como esas es increíble. Porque en un tiempo donde el egoísmo y la violencia se ha instaurado, también se puede amar y ser solidario", dice.

Fuente: La Voz