Leonardo DiCaprio es un conocido aficionado a los deportes. Es muy común verlo en la primera fila de los partidos de la NBA alentando a Los Angeles Lakers, y ahora no sorprendió que se mezcle entre la multitud para ver el primer partido del Mundial.
Lo que sí sorprendió es cómo se camufló para pasar inadvertido en la tribuna, algo que claramente no pudo lograr porque pareciera que siempre hay una cámara dispuesta a encontrar a un famoso escondido. El "lobo de Wall Street", se puso una llamativa camisa con la bandera de Brasil estampada, una boina y unas grandes gafas oscuras.
Su llegada a las costas del país vecino fue no menos excéntrica: según informa el Daily Mail alquiló el quinto yate más grande del mundo, llamado Topaz, valuado en 678.868.000 dólares, propiedad del Sheik Mansour bin Zayed Al Nahyan, miembro del gobierno de los Emiratos Arabes y dueño, entre otras empresas, del Manchester City FC. Desde allí, DiCaprio y sus amigos disfrutarán de la Copa del Mundo y seguramente lo veremos varias veces en las tribunas.
Fuente: Personajes.TV